(CNN) – En esta época del año, las pistas de Gulmarg suelen estar abarrotadas de snowboarders y esquiadores, todos aprovechando la nieve de enero que cada año cubre el Himalaya.
Pero, como ocurre con muchos destinos de esquí populares en invierno, esta estación de la Cachemira administrada por la India sufre escasez de nieve debido a un tiempo inusualmente seco, lo que decepciona tanto a los viajeros como a los operadores turísticos.
La estación de esquí de Gulmarg —una de las más altas del mundo— se encuentra en la cordillera Pir Panjal del Himalaya, a poco más de 50 kilómetros de la ciudad de Srinagar y a unos 20 kilómetros de la Línea de Control (LoC), la frontera de facto que divide esta disputada región entre India y Pakistán.
La estación ofrece más de 1.330 metros verticales de terreno esquiable y es famosa sobre todo por la telecabina de Gulmarg, que asciende hasta una altitud de 3.980 metros.
A pesar de la falta de nieve, una empleada de la estación de esquí de Gulmarg contactada por teléfono y que no quiso que se revelara su nombre dijo a CNN Travel que sus hoteles han registrado unos índices de ocupación muy elevados en los últimos días.
Aunque reconoce la sequía, afirma que los turistas aún tienen cosas que hacer en Gulmarg, como subir a la telecabina, que ofrece magníficas vistas de los picos nevados.
Pero con las pistas secas, quienes se ganan la vida atendiendo a la afluencia anual de aficionados al esquí y al snowboard, como Asif Ahmad Bhat, de 23 años, se han quedado sin trabajo.
Este lugareño de Gulmarg, que enseña snowboard a niños y adultos, dice que la zona suele acoger a dos tipos de personas.
“Los primeros son los que vienen solo por turismo, con la familia y los amigos”, dice.
“Luego hay un segundo tipo que vienen aquí por las actividades deportivas de aventura, como el esquí y el snowboard. Estos últimos son nuestros clientes y les hemos dicho que no vengan a Gulmarg”.
“Estamos muy decepcionados”
Bhat afirma que tuvo que cancelar cuatro reservas en diciembre y otras 23 en el periodo previo al 21 de enero.
“No queremos que vengan y se sientan decepcionados”, dice, y añade que las temperaturas han subido tanto que la mayor parte de la nieve existente también se ha derretido.
“Vamos a ver si hay nieve hacia la segunda quincena de enero. Entonces nos pondremos en contacto con nuestros clientes”.
Sahil Ahmed Lone, de 25 años y residente en Gulmarg, es monitor de snowboard desde hace cinco años. Dice que había mucho optimismo en que enero traería fuertes nevadas.
“Estamos muy decepcionados”, dice a CNN Travel. “Hicimos muchas reservas de nuestros clientes, pero les estamos diciendo que no. Esto definitivamente está afectando al sector turístico”.
Lone dice que ya ha cancelado cinco reservas y que tiene entre cinco y siete más en cola que quizá también tenga que suprimir.
El instructor añade que tuvo que llevar a un cliente que ya había viajado a Gulmarg para hacer snowboard a 10-12 kilómetros, cerca de la frontera, donde sí hay nieve.
“Pero no quedaron contentos porque no había mucha nieve y había rocas”, dice Lone, y señala que han estado aconsejando a los clientes que no vengan.
“¿Qué harían aquí sin nieve?”.
La demanda sigue existiendo
En los meses de verano, Gulmarg —cuyo nombre significa “pradera de flores”— atrae a senderistas y amantes de la naturaleza.
En 2023, la ciudad recibió la cifra récord de 1,65 millones de turistas, según varios medios de comunicación que citan a funcionarios del Gobierno. Esto ha llevado al optimismo de que 2024 será un año aún más fuerte.
Raja Yaqoob, director de turismo de la Cachemira administrada por India, cree que la temporada de esquí aún puede salvarse. Aunque se ha retrasado entre 10 y 15 días debido a la sequía, afirma que “esperan una buena nevada en los próximos días. Así que la pérdida de nieve (también será) compensada”.
Yaqoob señala que la temporada de nevadas en Gulmarg va tradicionalmente de noviembre a febrero-marzo.
“Esta vez ha nevado una o dos veces en diciembre, pero la nevada prevista para enero aún no se ha producido”, dice, y añade que El Niño está detrás del retraso.
“Esto no es exclusivo de Cachemira, sino que también está ocurriendo en Leh, Ladakh, Uttarakhand y otros lugares del Himalaya. En cuanto a la ocupación hotelera, sigue siendo del 95-100% en todas partes, por lo que la demanda sigue ahí y los turistas aún no se echan atrás. Con la llegada de la nieve pronto mejorará la situación”.