(CNN) – Las geishas y las maiko (aprendices adolescentes que se preparan para convertirse en geishas) son mujeres que realizan artes tradicionales japonesas como cantar, bailar y tocar instrumentos para entretener a los clientes mientras éstos cenan y beben.
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Muchas de ellas trabajan y residen en Gion, un elegante e histórico barrio de Kioto, una de las ciudades turísticas más populares de Japón. Cuando estas mujeres viajan entre el trabajo y su hogar deben caminar por las calles, ofreciendo un hermoso espectáculo con sus tradicionales kimonos y maquillaje.
Sin embargo, los viajes de las geishas también se han convertido en una atracción turística, con multitudes de visitantes que intentan tomarles fotografías mientras ellas recorren las pintorescas calles. Como resultado, estos turistas han recibido un apodo desafortunado: “paparazzis de geishas”.
A los turistas extranjeros a veces les cuesta entender las costumbres y las formas japonesas. En 2015, Kioto publicó panfletos y folletos en papel que utilizaban pictogramas para ilustrar las “actividades que resultaban molestas” de los viajeros, como tirar basura, usar palos para selfies, fumar en áreas prohibidas y tomar fotografías de geishas y maikos.
Pero fueron las fotografías, especialmente los “paparazzis de geishas”, las que resultaron el mayor dolor de cabeza, alcanzando un punto de ebullición en 2019 cuando hubo informes de visitantes con mal comportamiento que tiraban de los kimonos de las mujeres, las perseguían con cámaras y teléfonos inteligentes, les quitaban los adornos que llevaban en el cabello ( los kanzashi) e incluso les tiraban sus colillas de cigarrillos. Ese año, Gion comenzó a colocar carteles y avisos que prohibían las fotografías, advirtiendo que los infractores se enfrentarían a una multa.
Isokazu Ota, secretario representante del Consejo del Distrito Sur de la ciudad de Gion, le dijo a CNN que a pesar de las medidas, los “paparazzi” se han vuelto más descarados desde el regreso del turismo de masas a Japón tras la pandemia.
Muchas reglas, poca aplicación
Hoy en día, carteles en tres idiomas también explican que no se permite fotografiar a las geishas sin permiso, y que los infractores podrían recibir multas de hasta 10.000 yenes (unos US$ 67).
Sin embargo, según Ota, esta multa no se puede aplicar.
El consejo local de Gion está tomando medidas para cerrar completamente los pequeños callejones laterales a los turistas para abril de 2024. Pero la vía principal de Gion, Hanamikoji, no puede estar sujeta a la prohibición de fotografiar ya que es una calle pública. La mayoría de las maiko y geishas usan este camino, lo que lo convierte en el lugar privilegiado para que se reúnan los “paparazzi”.
“Las personas que toman fotografías de la calle principal de Gion y los turistas que toman fotografías de las maiko desde lejos probablemente desconocen la norma que lo prohíbe”, dice Ota. “Pero creo que los turistas extranjeros que esperan la salida de una maiko por los callejones de las áreas prohibidas sí conocen bien las reglas y simplemente eligen ignorarlas. Incluso si quisiéramos avisar, sería difícil comunicarnos con ellos en ese momento”.
Como resultado, Ota dice que algunos lugareños se han encargado de disciplinar a los turistas que se portan mal.
Aún así, Ota y otros residentes de Gion están buscando formas de frenar los problemas causados por los “paparazzi de geishas”. Ha sugerido exigir que todos los turistas que visiten el vecindario tengan un guía turístico japonés que pueda educarlos sobre cómo comportarse.
También cree que una mayor educación ayudará a las personas a encontrar formas de conocer e interactuar con las maiko y geishas sin acosarlas en la calle.
Por ejemplo, el Teatro Gion local, ubicado en la calle Hanamikoji, presenta periódicamente actuaciones de maikos, después de las cuales los miembros del público pueden tomarse fotografías con las mujeres.
¿Cómo se manejan problemas similares en otras comunidades?
Si bien las geishas solo existen en Japón, los problemas con las formas a la hora de tomar fotografías han aumentado enormemente en la era de las redes sociales.
La popular “Train Street” ( o calle del tren, en español) de Hanoi, donde las casas están ubicadas a solo unos centímetros de una vía de tren desde la época colonial, se convirtió en un gran éxito en Instagram en los últimos años.
Sin embargo, como las vías todavía están en uso y los accidentes y lesiones se están convirtiendo en un problema de seguridad mayor, el gobierno local de Hanoi ordenó el cierre de todos los cafés a lo largo de la “Train Street” en 2022 y retiró sus licencias comerciales.
Además, grandes barricadas fueron levantadas para mantener a la gente alejada de las vías.
Del otro lado del mundo, surgió una tendencia en la que los visitantes tomaban fotografías en las que parecía que estaban “hurgando en la nariz” de las famosas esculturas Moai de la Isla de Pascua.
Ahora, la combinación de exceso de turismo y malas formas fotográficas ha llevado a una serie de controles en la isla. Las visas de turista se redujeron de 90 días a 30, y los visitantes sólo pueden caminar por senderos designados en lugar de acercarse a los moai.