(Reuters) – El entrenador de Uruguay, Marcelo Bielsa, ha instado a su equipo a salir decidido a tomar ventaja este sábado cuando se enfrente a Brasil en los cuartos de final de la Copa América en el Allegiant Stadium de Las Vegas.
Uruguay, que ganó los tres partidos de su grupo y anotó ocho goles para terminar primero del Grupo C, espera avanzar a las semifinales y el entrenador buscará implementar su estilo de ataque con alta presión contra los brasileños.
“Normalmente me centro en el sector del campo en el que jugamos, en cómo recuperamos el balón, si amenazamos y cómo amenazamos, y si la forma en que construimos el ataque es el estilo con el que quiero que juegue el equipo”, dijo Bielsa durante una conferencia de prensa el viernes.
El técnico también afirmó que la ausencia de Vinicius Jr. en la selección de Brasil no será un factor en su estrategia y lo calificó como el mejor extremo del mundo.
“Personalmente, no creo que su ausencia nos afecte. Brasil es un país que tiene muchos extremos en ambos lados del campo en este momento y juegan en grandes equipos de todo el mundo”, destacó Bielsa. Sobre el sustituto del atacante, el joven Endrick, el entrenador dijo que “no será fácil neutralizar”.
Vinicius no podrá jugar el partido por acumulación de tarjetas amarillas. Será reemplazado por el adolescente prodigio Endrick, de 17 años, también conocido como “Messinho”, quien tendrá su primera titularidad con la selección brasileña.
“Hemos perdido a un jugador importante, pero hemos ganado a un jugador que está buscando una oportunidad. Quizás este sea el momento de Endrick”, dijo por su parte el entrenador de Basil, Dorival, el viernes en conferencia de prensa.
“No creo que Endrick sea específicamente un nueve que juega fijo, es un jugador que flota, que se mueve. El equipo está en constante evolución, por eso dije que no nos apresuremos a hacer nada con él. Es simplemente cuestión de tiempo para que encontremos la mejor formación”, agregó.
El técnico de 62 años, que asumió el cargo en enero y hasta ahora ha dirigido siete partidos, clasificó a Brasil a los cuartos de final como segundo del Grupo D con cinco puntos, dos menos de los que registró el líder, Colombia.
“En total hemos estado juntos durante 37 días, unos 20 entrenamientos oficiales, con toda la plantilla, hemos avanzado mucho y aún quedan algunas cosas por resolver, pero eso es parte del proceso. Siempre habrá críticas, sin importar dónde estés en la tabla, lo importante es encontrar un camino saludable para el equipo”, apuntó.
El técnico reconoció que el partido ante Uruguay es un gran clásico sudamericano: “Será un partido importante para Brasil y también para Uruguay, es un equipo que merece todo nuestro respeto y no tengo ninguna duda de que tendrán problemas contra nosotros. Son equipos que se conocen y se respetan, y nosotros tenemos todo para hacer un gran partido”.