(CNN) – Estados Unidos y Corea del Sur alcanzaron un nuevo acuerdo preliminar de cinco años para compartir los costos de las fuerzas estadounidenses basadas en Corea del Sur, anunció el Departamento de Estado este viernes, en un acuerdo que salvaguardaría la alianza de larga data antes de una posible victoria del expresidente Donald Trump en noviembre.
El acuerdo actual no expira hasta finales de 2025, pero ambas partes sintieron la urgencia de lograr el acuerdo antes de una posible segunda administración de Trump, dijeron previamente a CNN dos funcionarios estadounidenses y dos exfuncionarios estadounidenses familiarizados con las discusiones. Las negociaciones sobre el Acuerdo de Medidas Especiales, conocido como SMA, tensaron la alianza durante la administración Trump, y el expresidente exigió que Seúl pagara hasta un 400% más por la presencia de los 28,500 soldados estadounidenses en el país durante las negociaciones sobre el acuerdo actual.
No se divulgaron de inmediato detalles específicos sobre el nuevo acuerdo anunciado, incluidos su costo, cuándo se firmará y cuándo entrará en vigor. Matthew Miller, portavoz del Departamento de Estado, dijo en un comunicado que el nuevo acuerdo se alcanzó después de ocho rondas de negociaciones. Tendrá que ser aprobado por la Asamblea Nacional de Corea del Sur, que está dominada por el partido de oposición al presidente surcoreano Yoon Suk Yeol, y el Congreso de EE. UU. no tiene ningún papel en la finalización de un acuerdo del lado estadounidense.
Los defensores argumentan que una presencia significativa de tropas estadounidenses en la península de Corea es crucial para fortalecer la alianza entre los dos países. Las tropas son importantes para ambos países como un medio para disuadir cualquier posible ataque de Corea del Norte, ya que el régimen de Kim Jong Un continúa construyendo su arsenal nuclear y como una forma de reforzar la presencia estadounidense en la región para contrarrestar la agresión de China.
Había más urgencia para cerrar el acuerdo antes de fin de año del lado coreano, dada la agitación de la ronda anterior de negociaciones, dijeron los funcionarios. Algunos funcionarios temían que cerrar un acuerdo ahora pudiera desencadenar críticas de Trump, y no querían que la alianza estuviera en la línea de fuego del expresidente si gana las elecciones en noviembre.
Bajo el acuerdo actual, Corea del Sur paga alrededor de US $1.130 millones anualmente, lo que representa un aumento de aproximadamente 13.9% sobre los SMA anteriores.
Los funcionarios de la administración de Trump negociaron en gran medida los términos del último acuerdo, pero no entró en vigor hasta marzo de 2021, solo unos meses después de que el presidente Joe Biden asumiera el cargo, lo que permitió a los funcionarios de la administración Biden realizar cambios que llevaron el acuerdo a su estado final.
Durante la fase inicial de las conversaciones, CNN informó que Trump había pedido a Corea del Sur que pagara US$ 4.700 millones al año, una exigencia que surgió de la nada y que hizo que funcionarios de los Departamentos de Estado y Defensa se apresuraran a justificar la cifra.
A principios de este año, Trump dijo que no creía que Corea del Sur estuviera pagando lo suficiente según el último acuerdo.
“Fueron capaces de renegociar con la administración Biden y reducir esa cifra a lo que era antes, que era casi nada”, dijo Trump a principios de este año durante una entrevista con Time. “¿Por qué íbamos a defender a alguien? Y estamos hablando de un país muy rico. Pero son un país muy rico y ¿por qué no iban a querer pagar?”.
Algunos exfuncionarios estadounidenses han advertido a Corea del Sur que no avance demasiado rápido hacia un acuerdo porque podría ser contraproducente si Trump termina en la Casa Blanca.
Gawon Bae de CNN contribuyó a este informe.