Londres (CNN) – Decenas de miles de trabajadores de Volkswagen participarán este lunes en huelgas en plantas de toda Alemania, dijo el sindicato IG Metall, un signo de los mayores paros en las operaciones nacionales del fabricante de automóviles desde 2018.
Las huelgas, que están planeadas para durar varias horas, siguen a semanas de negociaciones colectivas durante las cuales VW se negó a descartar despidos masivos y posibles cierres de plantas en su mercado local, medidas drásticas que la compañía dice son necesarias para apuntalar su fortuna en medio de la competencia con China y una demanda europea más débil.
Una llamada “obligación de paz” entre los trabajadores y la empresa, que prohibía la acción industrial, expiró este sábado, permitiendo que las huelgas se lleven a cabo desde el domingo en prácticamente todas las fábricas alemanas de Volkswagen.
“Si es necesario, esta será la disputa salarial más dura que Volkswagen haya visto”, dijo el negociador jefe de IG Metall, Thorsten Groeger, en un comunicado este domingo. “Cuánto tiempo e intensa será esta disputa es responsabilidad de Volkswagen en la mesa de negociaciones”.
“Volkswagen ha incendiado nuestros acuerdos de negociación colectiva, y en lugar de extinguir este fuego durante tres rondas de negociaciones, la junta directiva sigue arrojando barriles abiertos de gasolina sobre él”, agregó.
Las huelgas serán las primeras a gran escala que Volkswagen enfrenta desde 2018, según IG Metall, cuando 50.000 trabajadores paralizaron plantas por salarios. Aunque los paros de trabajo durarán solo unas pocas horas, es posible que se convoquen huelgas de advertencia de 24 horas más adelante este año. También se podrían convocar huelgas indefinidas como último recurso, pero solo después de que los miembros hayan sido consultados nuevamente, dijo IG Metall.
Las huelgas representan un nuevo dolor de cabeza para el mayor fabricante de automóviles de Europa, que vio caer su beneficio operativo en el primer trimestre del año en una quinta parte respecto al año anterior, ya que su marca insignia tuvo dificultades. Las ventas de vehículos también disminuyeron debido a una demanda particularmente débil en China, donde está perdiendo cuota de mercado frente a las marcas chinas de vehículos eléctricos.
Un portavoz de Volkswagen dijo en un comunicado que el fabricante de automóviles había tomado medidas por adelantado para minimizar el impacto de la huelga en sus fábricas y clientes.