(CNN Radio Argentina)— ¿Diego Maradona es el argentino que mejor representa al país o necesita de alguien más para complementar al llamado ser nacional?
El politólogo Andrés Malamud intentó este lunes responder a este interrogante en CNN Radio y dijo que el astro fallecido el miércoles pasado a los 60 años se complementa nada más y nada menos que con un personaje muy querido por los argentinos: Mafalda.
Joaquín Lavado, su autor, alias “Quino, era universal. Cuando muere sale en todos los diarios del mundo”, aunque “no en todas las tapas” como Maradona, sostuvo el politólogo de la Universidad de Lisboa en Café con Pepe.
Y añadió: “Mafalda representaba lo aspiracional de la clase media con mucha intelectualidad y Maradona las aspiraciones de los sectores populares, los que tienen más pasión que razón”.
Para Malamud, “Maradona era brillante, era astuto, pero juntos pintan al país, un país que es único en América Latina por su condición de su clase media y por su capacidad de los sectores populares de aspirar y lograr algo más, de ascender socialmente”.
El especialista dijo que “Argentina sigue teniendo ese valor aspiracional” de su sociedad, lo que lo diferencia del resto de la región. “Ya no es lo que se pensó que era, pero sigue aspirando a serlo. La aspiración sigue definiendo a la Argentina y Maradona encarnaba” eso, apuntó.
Malamud sostuvo que “algunos hablan que (Maradona) es el espejo” el país, pero aclaró que él lo veo “como una parábola”.
“El país se destaca por sus orígenes, en el siglo XX llegamos al estrellato, vienen líderes de Europa a celebrar el brillo y resplandor de una nueva nación, después todo sabemos” lo que sucedió. “Nunca nos levantamos económicamente. Y Maradona es alguien que desde la nada llega al cielo, y después empieza a caer como serrucho, cae y se levanta, siempre un escalón hacia abajo. Es difícil no verse reflejado”, enfatizó.
Y añadió: “Somos Mister Jekyll y Mister Hyde. Tenemos dos caras. Es una montaña rusa. Argentina vive agitada, subiendo y bajando de manera violenta con curvas impresionantes. Pero al final vuelve al punto de partida, es el país del eterno retorno”.
Malamud dijo que Argentina “tuvo un gran Estado y todo eso se fue desgastando y cuando asume un nuevo” presidente “llega más improvisado, encuentra que el auto no funciona, no tiene motor, y no importa para dónde gira el volante sigue en el mismo lugar”.
“El resto del mundo avanza, Argentina está parada. Hay que arreglar el auto, pero no lo va a hacer una sola persona”, indicó.