Fernando Navarro, secretario de Relaciones Parlamentarias de la Jefatura de Gabinete.

(CNN Radio Argentina) – Fernando “Chino” Navarro, secretario de Relaciones Parlamentarias, Institucionales y con la Sociedad Civil de la Jefatura de Gabinete, señaló este jueves en CNN Radio que el Gobierno está “trabajando” para que los dirigentes opositores encarcelados en Nicaragua “sean liberados” y aseguró que la Argentina “no votó a favor” de la gestión de Daniel Ortega en el país centroamericano, sino que “propiciamos una solución, pero no con salidas que terminen en un golpe militar”.

En el programa Café con Pepe, el referente del Movimiento Evita indicó que “cuando recibimos informes de organismos como las Naciones Unidas sobre violaciones a los derechos humanos siempre acompañamos sin dudas. Hace poco acompañamos el de Michelle Bachelet sobre Venezuela”, a la vez que resaltó que “el de Nicaragua es otro problema: hay tensión por el rol del presidente de la OEA, (Luis) Almagro, que juega a un acuerdo de un sector partidario que en su momento tuvo preeminencia en América Latina, liderado por Mauricio Macri e Iván Duque, de Colombia, que busca acorralar y aislar a las naciones que tienen una democracia irregular para provocar su caída. En Bolivia facilitaron un golpe militar. Pero no avalamos lo que pasa en Nicaragua. Propiciamos una salida pacífica”.

La Argentina se abstuvo ante la Organización de Estados Americanos de condenar los arrestos de opositores en Nicaragua. Ya son 13 los líderes políticos detenidos y acusados de cometer actos contra la soberanía nacional. Cuatro de ellos son potenciales candidatos presidenciales. La OEA repudió estos hechos y pidió la inmediata liberación de los dirigentes.

“En la OEA pontifican presidentes o gobiernos que matan a sus ciudadanos en la calle. Que esto lo resuelva el pueblo de Nicaragua. No se va a solucionar con la injerencia internacional ni con bloqueos. La única forma son las elecciones”, desgranó en diálogo con Pepe Gil Vidal.

Por otro lado, Navarro se refirió a las rispideces entre el Gobierno y el sector agropecuario: “Queremos reconstruir la relación. Buscamos que se exporte y que seamos socios. Esto no se hace de un día para el otro. Hay una legítima desconfianza desde el campo por lo que pasó con la 125 (en 2008), pero estamos dispuestos a dialogar”. Y aludió al cierre de exportaciones de carne vacuna, que motiva permanentes reclamos de las entidades y los productores rurales: “Queremos resolver esto positivamente. Tuvimos que tomar esta medida por la subfacturación y la evasión de sectores egoístas. No es fácil, pero a la brevedad vamos a tener una solución que, aunque no deje conforme al 100 %, resuelva el problema para la gente y para los exportadores”.