Felipe Solá, excanciller argentino, y Guillermo Justo Chaves, designado como representante especial de la Misión Permanente ante la ONU en Nueva York.

(CNN Radio Argentina) –  El diplomático Ricardo Lagorio, exembajador argentino en Rusia, consideró este jueves en CNN Radio que con el nombramiento de Guillermo Justo Chaves, cuñado del excanciller Felipe Solá, como representante especial de la Misión Permanente ante Naciones Unidas en Nueva York “se desmerecen la política exterior y el tránsito en el mundo moderno, que exige mucho profesionalismo”.

“¿Por qué dejar de lado a los diplomáticos y recurrir al amiguismo?”, se preguntó durante la emisión del ciclo Café con Pepe. “Llevo 40 años en la diplomacia práctica y teórica y jamás he visto nada similar”, expuso el entrevistado, a la vez que sostuvo que “no se puede empezar desde arriba”.

El cargo asignado por el Gobierno “exige profundos conocimientos técnicos. Con todo respeto, no creo que el doctor Chaves tenga la idoneidad que se necesita para cumplir con esa función”, auscultó.

Chaves fue jefe de Gabinete durante la gestión de Solá en Relaciones Exteriores y, según un decreto firmado por el canciller Santiago Cafiero, contribuirá “en el trabajo permanente realizado ante el Comité de Descolonización que demanda redoblar las acciones tendientes al reclamo permanente por la soberanía de la República Argentina sobre las Islas Malvinas, Georgias, Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes”.

Chaves tendrá el rango de Embajador Plenipotenciario de Primera Clase y se ocupará además de cuestiones como medio ambiente y multilateralismo. Nació en La Plata, tiene 50 años, es magister en Ciencias Políticas y abogado.

“Después de 40 años en la diplomacia, recién el año pasado escuché hablar de Chaves. Al mandarlo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como embajador se genera una disfuncionalidad sobre cómo se inserta en el organigrama”, deslizó Lagorio en diálogo con Pepe Gil Vidal.

“Las cancillerías perdieron el monopolio de la política exterior. Hay que reforzarlas”, evaluó. Y añadió: “En la Argentina se tiende a subestimar la diplomacia y otras profesiones. La política exterior es una de las principales funciones del Estado moderno”.

“Todos los ámbitos se han internacionalizado. Hoy el medio ambiente, la salud, la ciencia y la tecnología son temas globales. Improvisar a alguien y ponerlo en el más alto nivel no va”, desgranó en otro pasaje de la entrevista.

“Considero que el nombramiento de Guillermo Justo Chaves no se encuadra en la Ley del Servicio Exterior de la Nación, porque a él no lo nombran para la realización de cometidos especiales y concretos sino que lo trasladan a la Misión Permanente de Argentina ante la ONU en Nueva York y le dan rango de embajador, el máximo para un diplomático. Más que provocarme enojo, esto me preocupa”, cerró.