(CNNMoney) – Parece que Wall Street está cansado de que Elon Musk prometa demasiado y ofrezca poco sobre el nuevo automóvil eléctrico Model 3 de Tesla.
Las acciones de Tesla cayeron 3% el jueves después de que la compañía reveló que todavía tiene dificultades para entregar su Model 3 a los clientes a tiempo. Tesla está muy rezagado en sus ambiciosos objetivos de producción.
La acción se ha desplomado más del 20% desde el máximo histórico que alcanzó el año pasado, lo que significa que ahora Tesla técnicamente está en su propio pequeño mercado bajista.
Los vendedores en corto, los inversores que apuestan a que las acciones bajarán y que se benefician cuando baja el precio, han acumulado acciones de Tesla últimamente.
Según la firma de investigación S3 Partners, que hace un seguimiento de las ventas en corto, Tesla ha sido un negocio extremadamente rentable en los últimos meses.
Ihor Dusaniwsky, director gerente de análisis predictivo para S3 Partners, tuiteó —después de las decepcionantes previsiones de Tesla— que los vendedores en corto podían esperar obtener casi 240 millones a partir del descenso más reciente de la acción.
Incluso las grandes y conocidas firmas de Wall Street están amargando sus expectativas sobre Tesla.
El analista de JPMorgan Ryan Brinkman escribió en un informe el mes pasado que cree que las acciones de Tesla podrían caer 40% en 2018 debido a las dificultades del Model 3.
La competencia podría ser otro gran problema.
Aunque Tesla es el claro líder en los vehículos eléctricos de lujo y gama alta gracias a su sedán Model S y al Model X crossover, no está claro si Tesla podrá vender tantos Model 3 más baratos como sea necesario para convertirse realmente en una verdadera compañía automotriz del mercado masivo.
Nissan ya está vendiendo el Leaf. Y GM lleva una gran ventaja sobre Tesla con su Bolt. General Motors dijo el miércoles que entregó más de 3,200 Bolts a sus clientes en diciembre, más del doble de los Model 3 que Tesla entregó durante todo el cuarto trimestre.
También está la cuestión de si Tesla (y Musk en ese caso) se han expandido en exceso.
Tesla también está ocupada aumentando la producción de un semicamión para grandes clientes corporativos (Walmart y UPS ya han realizado pedidos) e está integrando su adquisición de la firma de paneles solar SolarCity.
Esto no sería necesariamente un problema si Tesla ya fuera un líder de mercado rentable.
Pero la compañía sigue perdiendo dinero, lo que hace temer que Tesla necesite vender más acciones para financiar sus ambiciosos planes. Eso reduciría el valor de las acciones para los inversores existentes de Tesla.
Finalmente, Musk también dirige la compañía de cohetes SpaceX y el negocio de túneles The Boring Company.
Entonces, es razonable que Wall Street se pregunte si Musk simplemente tiene demasiado en sus manos. Tesla es una acción de culto clásica. La rodea un bombo considerable y es posible que sea Tesla no esté a la altura.