(CNN) – Más de 120 ballenas preñadas fueron cazadas durante la temporada anual en Japón, el verano pasado, según revela un informe, lo que provocó indignación entre conservacionistas.
Las cifras muestran que 128 de las 333 ballenas minke capturadas durante la expedición de 12 semanas en el océano austral eran hembras. 122 de ellas estaban preñadas.
Las cifras se publicaron en un informe técnico presentado a la Comisión Ballenera Internacional y preparado por representantes del Instituto de Investigación de Cetáceos, una agencia vinculada al Ministerio de Pesca de Japón.
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Los conservacionistas recibieron el contenido del informe con furia, calificando las estadísticas de “impactantes” y a la masacre de “aborrecible”.
“Es una muestra más, si es necesario, de la naturaleza realmente espantosa e innecesaria de las operaciones de caza de ballenas, especialmente cuando se ha demostrado que los estudios no letales son suficientes para las necesidades científicas”, dijo Alexia Wellbelove, gerente sénior de Programas de Humane Society International, en un comunicado.
Japón ha justificado previamente su caza de ballenas en una exención en el Derecho Internacional que permite la matanza de animales con fines científicos. Sin embargo, Australia ganó un juicio en 2014 ante la Corte Internacional de Justicia, instancia que falló en contra del programa japonés.
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Sin embargo, tras el fallo, Japón anunció un nuevo programa de investigación, en el que mataría hasta 333 ballenas minke antárticas cada año. El Ministerio de Pesca japonés dijo que era necesario para estudiar los mejores métodos para manejar las poblaciones de ballenas minke.
“La matanza continua de cualquier ballena es aborrecible para la sociedad moderna, pero estas nuevas cifras lo hacen aún más impactante. Esperamos que Australia y otros países a favor de la conservación envíen el mensaje más fuerte posible a Japón de que debería parar sus programas letales de caza de ballenas,”dijo Wellbelove.