Nueva York (CNN Business) – Mujeres, cuiden sus perlas. Los hombres vienen a por ellas.
La joyería de perlas ahora está llamando la atención de algunos hombres, con collares, pulseras, anillos y aretes, infundiendo este clásico femenino con un toque más audaz y rudo.
Los hombres están usando perlas sin reparo en todo tipo de escenarios.
Los jugadores de béisbol de las Grandes Ligas han adornado sus cuellos con perlas para salir al campo de juego. Íconos del rap y el pop como Drake y Harry Styles las están volviendo populares, al igual que los actores de Hollywood y los modelos en las pasarelas.
Las joyerías dicen que la tendencia de perlas para hombres comenzó a surgir antes de la pandemia a medida que la industria de la moda evolucionó y adoptó la fluidez del género. La pandemia ayudó a impulsar aún más la tendencia.
“La joyería para hombres comenzó a despegar antes de la pandemia. En cuanto se dio el confinamiento y comenzamos a vivir en este mundo virtual, pronto se convirtió en ver cómo arreglarnos del cuello hacia arriba, del mismo modo en que comenzó la búsqueda de joyería digna de mostrarse en Zoom para las mujeres”, dijo Angie Kennedy, vicepresidente de mercadotecnia en Zales, una división de Signet, la mayor joyería de Estados Unidos que también es propietaria de Kay Jewelers y Jared.
Al principio, los hombres buscaban formas de vestir el cuello y resaltar el rostro con pendientes de aro, dijo, y acentuar su estilo con diamantes blancos y negros.
“En la última temporada de béisbol, vimos a los jugadores salir al campo con collares de perlas. Eso consolidó la tendencia para nosotros”, dice Kennedy.
Pero estos hombres no llevan el clásico collar de perlas blancas de tu abuela. “Están incorporando diamantes, o añadiendo perlas a una cadena de oro. Algunos llevan también una pulsera a juego”, dice Kennedy.
También llevan perlas de distintos colores, como el rosa, el negro o las perlas de Tahití, y los estilos incorporan a veces elementos de diseño como calaveras, una cabeza de clavo o garras de animales.
Aunque los hombres se inclinan por estos estilos más atrevidos, Kennedy afirma que su intención es que sean neutrales en cuanto al género. “Ella puede llevarlo un viernes por la noche y él para ir a un partido el sábado. Lo que antes se llevaba de una manera mucho más formal, ahora se puede llevar con una camiseta”, dijo.
Hay otra razón por la que las perlas están resurgiendo en medio de una pandemia.
“Cuando las cosas dan miedo, la gente tiende a volver a las cosas que son clásicas o atemporales. Las perlas existen desde hace tiempo y seguirán existiendo. En cierto modo, representan la fuerza”, dice Kennedy.
Dar a las perlas un giro
Mikimoto, la empresa japonesa de joyería que creó la perla cultivada hace más de 125 años, es una de las marcas más prestigiosas del sector.
El pasado mes de septiembre, la empresa lanzó PassionNoir, una colección más atrevida que incluye perlas cultivadas de los mares del Sur de mayor tamaño ensartadas en un collar o una pulsera elástica o engastadas en anillos, pendientes de puño y collares hechos con plata platinada en negro.
Yasuhiko Hashimoto, CEO de Mikimoto America, dijo que PassionNoir se creó porque la marca había observado el creciente interés de los compradores masculinos por las joyas de perlas. Pero dijo que la colección, de aspecto masculino, también atrae a las mujeres.
La idea de que los hombres lleven perlas no es nueva, dijo, señalando que los maharajás indios y los reyes británicos y europeos han llevado collares de perlas por siglos.
“La perla era un símbolo de poder”, dice. “Sigue siendo atemporal y elegante, pero también puede ser un toque divertido. Los hombres de hoy se sienten capaces de arriesgarse con la moda y prueban cosas nuevas”.
¿Es una moda pasajera? Kennedy, de Zale, no lo cree.
“Las perlas son probablemente una de las primeras categorías de joyería en la que notamos el interés de los hombres”, dijo. En Signet, analizamos todas las categorías y pensamos: “¿Tenemos la oferta para él y para ella? Cada idea que se nos ocurre, ahora pensamos en cómo podemos hacerla más fluida desde el punto de vista del género”.