(CNN) – Margaret Atwood, autora de la novela distópica “The Handmaid’s Tale”, compartió su opinión sobre la revocación de Roe vs. Wade con cuatro pequeñas palabras y una taza de café.
La escritora publicó una foto en Instagram de ella misma sentada en una silla, sosteniendo una taza con la frase “Te lo dije”.
Por si se malinterpretara su significado, su pie de foto dice: “Café en Nueva Escocia con una taza de café con el eslogan apropiado…”
A medida que las leyes que regulan los cuerpos femeninos han proliferado en los últimos años, Atwood se ha convertido en una especie de profeta pop no anticipada. Su novela de 1985 habla de Gilead, un Estados Unidos teocrático fascista en la que las mujeres son utilizadas como cerdas reproductoras para las familias de clase alta. Una adaptación de Hulu que se transmitió por primera vez en 2017 introdujo la sombría historia aún más en la conversación cultural.
Las personas vestidas con las icónicas túnicas rojas y los bonetes blancos de la historia han sido un elemento básico en las manifestaciones públicas, desde las marchas de mujeres durante la presidencia de Donald Trump hasta las recientes protestas por el derecho al aborto después de que la Corte Suprema anulara el caso Roe vs. Wade.
Atwood admite que no imaginó que su obra de ficción se compararía tanto con la realidad.
“Uno escribe estos libros para que no se hagan realidad”, dijo a People en 2017.
Sin embargo, el sometimiento y la coacción sexual de las mujeres siempre han sido una verdad muy arraigada en la historia de Estados Unidos. No había nada ficticio en las experiencias de las mujeres negras bajo la esclavitud, ni hay nada ficticio en la experiencia de las mujeres en la pobreza, los inmigrantes, los indígenas, las personas LGBTQ, los niños y otros que están desproporcionadamente en riesgo de explotación y abuso sexual.
Atwood ha sido una firme defensora de los derechos reproductivos. Tras su publicación en Instagram, aclaró aún más su posición en Twitter: “Cuando ‘Handmaid’s Tale’ salió en el 85, hubo incredulidad. Pensé que era posible una toma de posesión de la derecha religiosa en Estados Unidos, y era la loca Margaret. Prematuro, pero desgraciadamente demasiado cercano. Eso no me hace feliz”.