Kenly, Carolina del Norte (CNN) – El éxodo masivo de todo un departamento de policía tras la contratación de una gestora municipal negra en Carolina del Norte ha abierto un debate sobre la seguridad pública y las relaciones raciales en una pequeña ciudad de poco más de 1.500 habitantes.
La semana pasada, todo el departamento de policía de Kenly, Carolina del Norte dimitió alegando un entorno de trabajo “hostil”, menos de dos meses después de que Justine Jones, una mujer negra, comenzara a desempeñar su función como nueva gestora de la ciudad.
Joy Wright, propietaria de un negocio local, dijo que la comunidad está preocupada por lo que significa la renuncia colectiva de la policía para el futuro de la ciudad. Wright también dijo que estaba frustrada sobre todo porque la ciudad no había mantenido a los residentes al tanto sobre cualquier desarrollo.
“Es simplemente extraño, y para nosotros no tener ninguna información en cuanto a qué esperar”, dijo Wright. “¿Vamos a tener policía? ¿Vamos a tener un administrador municipal?”.
Tras una reunión de emergencia a puerta cerrada la semana pasada, el concejo municipal de Kenly emitió un comunicado esta semana diciendo: “El curso de acción prudente es averiguar lo que pasó y no tomar ninguna decisión precipitada”.
Alan “Chip” Hewett, abogado de la ciudad de Kenly, dijo a CNN que supervisará una investigación realizada por una empresa externa a partir de la próxima semana, cuando todas las dimisiones se hagan efectivas. Técnicamente, el jefe de policía y los agentes siguen en su puesto hasta principios de la próxima semana. La dimisión del jefe de policía se hará efectiva el martes.
CNN obtuvo ocho cartas de dimisión en total, que consisten en el veterano jefe de policía Josh Gibson, cuatro agentes a tiempo completo, un agente a medio tiempo y dos empleados de la ciudad. El lenguaje de las cartas es similar, y la mayoría hace referencia a un ambiente de trabajo estresante, aunque no proporcionan ningún detalle sobre el lugar de trabajo supuestamente “hostil”, ni culpan explícitamente a Jones.
Sin embargo, Gibson ha culpado a Jones de la dimisión, tanto en una publicación en Facebook que ahora es privada, así como en una entrevista exclusiva con Fox News en la que dijo que Jones le había escrito varias veces y que tenía algo en su contra.
“La nueva [gestora municipal] ha creado un ambiente en el que no creo que podamos cumplir con nuestros deberes y servicios a la comunidad”, dijo Gibson en su publicación en Facebook.
Jones comenzó como gestora municipal de Kenly el 2 de junio, según un anuncio de la ciudad que señala que fue aprobada por unanimidad por el concejo y promociona sus 16 años de experiencia trabajando en “posiciones progresivamente de mayor responsabilidad con los gobiernos locales” en múltiples estados.
Los residentes están divididos en cuanto a si se trata de una “cuestión racial”
Brittney Hinnant, residente de Kenly, dijo que siente que la situación es una “cuestión de raza” dado que Jones es negra, mientras que todo el Departamento de Policía de Kenly es blanco. Hinnant también dijo que no cree que el departamento de policía apoye a la gente negra y siente que a menudo acosan a los residentes negros.
“Siento que no quieren que una mujer negra esté encima de ellos, básicamente dirigiéndolos o diciéndoles lo que tienen que hacer”, dijo Hinnant.
Los estudios demuestran que la gente en las organizaciones suele pensar que las mujeres negras son más propensas a tener personalidades agresivas, y los estudios también sugieren que esta percepción negativa es un hecho exclusivo de las mujeres negras, según la Harvard Business Review.
Jones dijo a CNN que, dado que se trata de un asunto de personal, no puede hacer comentarios sobre las dimisiones de la policía.
Y otros residentes advirtieron que no hay que sacar conclusiones precipitadas, diciendo que siempre han tenido una buena relación con el departamento de policía.
Wright, propietaria del Granny Barn, una tienda de regalos de bordados y vinilos situada a dos puertas del Ayuntamiento, dijo que no cree que la situación fuera un “asunto de negros contra blancos”.
“Nunca he visto que eso sea un problema”, dijo cuando se le preguntó si creía que la raza había jugado un papel en la situación.
“Creo que hay demasiados que sacan conclusiones precipitadas, realmente no sabemos lo que está pasando. Sé que nunca he conocido a esta gestora municipal, nunca he tenido problemas con la policía, así que realmente no sé qué dinámica podría haber llevado a este tipo de decisiones”, dijo Wright.
Michelle Dawes, quien es de Kenly y solía trabajar para la ciudad, dijo a CNN que pensaba que la situación era complicada. Dijo que es posible que la raza y el género hayan desempeñado un papel en las dimisiones, pero que las cuestiones de responsabilidad están realmente en el centro de la situación.
“Nunca he tenido ningún problema personal con [el jefe de policía Josh] Gibson, pero como antigua empleada de la ciudad, sé cómo funciona allí”, dijo Dawes. “Inmediatamente supe que se trataba de alguien nuevo. Ella no sabe lo que son, yo las llamo, las ‘reglas extraoficiales’. Básicamente, cuando llegó y fue contratada, despertó a la fiera haciéndole rendir cuentas”.
La Oficina del Sheriff del Condado de Johnston, que ya presta servicio en Kenly, aumentará su presencia en la ciudad ahora que el departamento de policía se disolverá efectivamente.
Denise Bennett, nativa de Kenly, dijo que el momento en que se produjo todo le parece sospechoso, y agregó que la situación parece ser más sobre el poder en lugar de resolver cuestiones relacionadas con el trabajo. Bennett también dijo que algunos residentes han afirmado que las renuncias no tienen que ver con el racismo, pero ella no cree que se pueda descartar totalmente las cuestiones relacionadas con la raza como explicación.
“Cuando me di cuenta del poco tiempo que llevaba en el puesto y de la decisión tan drástica que se tomó, no me cabía en la cabeza”, dijo Bennett. “Con el hecho de que hay tantas cosas que uno puede hacer si cree que tiene un supervisor de pesadilla, hay tantas cosas que se pueden hacer. Pero que todo un personal policial tome la decisión de renunciar cuando han acordado proteger y servir, en lugar de utilizar todas las cosas que tienen delante para cambiar la situación… simplemente no tiene sentido para mí”.
– Wesley Bruer de CNN contribuyó con este reportaje.