(CNN Español) – Chocan los dos gigantes del fútbol de Argentina. River y Boca vuelven a enfrentarse este fin de semana en el clásico 259 de su historial. La cita es en el estadio “Más Monumental” que se prevé que esté repleto. Poco más de 83.000 hinchas millonarios -por seguridad no se permite la presencia de simpatizantes visitantes- darán marco a una fiesta del fútbol inconmensurable.
El partido corresponde a la fecha 15 del torneo argentino, la Liga Profesional. En este certamen, el River que dirige Martin Demichelis tiene un demoledor andar. Es el puntero indiscutido con 6 puntos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, que es San Lorenzo. Es el equipo que más goles a favor tiene en el torneo, 25, y la segunda valla en recibir menos tantos en contra, 6. La cima del campeonato con 34 puntos es producto de 11 victorias, un empate y solo dos derrotas. Le lleva 16 puntos de ventaja a Boca que se ubica en el puesto 13 de la tabla.
En los dos últimos compromisos los jugadores dirigidos por Demichelis resignaron puntos luego de tener 8 victorias consecutivas. Ambos empates fueron de visitante. Por el torneo local, y con formación alternativa, igualó como visitante en Tucumán. Los habituales titulares los guardó para el importante partido ante Fluminense en el marco de la Copa Libertadores. El duelo en el mítico estadio Maracaná del último martes fue un doloroso traspié en el que River cayó 1-5.
Los millonarios han tenido pocos días para lamerse las heridas de cara al gran duelo con el rival que más simboliza para ellos. River deberá recuperar el temple emocional que perdió ante el Fluminense por la expulsión de Gonzalo Pires en el minuto 67, cuando el juego estaba 1-2. Con un hombre menos, el equipo brasileño expuso su jerarquía y humilló al poderoso equipo del barrio de Nuñez. El objetivo de Demichelis es focalizarse en recuperar la memoria de un equipo que arrasa a sus rivales argentinos con su fútbol de gran dinámica, rápidas transiciones y compromiso con una idea sólida de juego.
Para River, las dudas en la formación están en la defensa. Paulo Díaz, en la zaga central, llega con una lesión que lo marginó en los últimos dos encuentros. Se lo exigió en los entrenamientos de los últimos días y no está descartado para el gran duelo. Emanuel Mammana no pudo terminar su partido ante el Fluminense por problema crónico en su rodilla, aunque tiene chances de estar entre los once titulares. Enzo Díaz regresa como titular en el lateral, reemplazando a Marcelo Herrrera.
La incógnita es el esquema que utilizará el técnico millonario. River suele jugar con una dupla de atacantes, aunque también varía por una disposición táctica de 5 volantes y un solo hombre de área en la ofensiva. La jerarquía de Armani en el arco, la enorme clase de Nacho Fernández en la creación y el buen momento del goleador Lucas Beltrán son credenciales de relieve en el millonario.
Boca tiene en Jorge Almirón su nuevo técnico en los últimos 6 partidos. Solo consiguió un punto en los primeros 3 encuentros. Luego sumó 3 victorias consecutivas. Derrotó a Racing 3-1 en la Bombonera y ganó dos partidos en la Copa Libertadores. En el templo xeneize venció agónicamente al Deportivo Pereira de Colombia y el último miércoles tuvo una sólida victoria por 2-0 ante el Colo-Colo como visitante en Chile.
En el torneo argentino, Boca ha sumado 18 puntos en 5 victorias, 3 empates y 6 derrotas. Su objetivo es recuperar el enorme terreno perdido en la tabla de posiciones. Para ello, el técnico ha dado algunas pinceladas del nuevo diseño táctico, dispuso de otros intérpretes en algunos puestos y le ha dado un temple emocional con el que encarar sus compromisos.
Almirón le dio rodaje al juvenil Ezequiel Barco como lateral izquierdo. Su estupendo juego, frescura y clase le brindó una cuota de fútbol que Boca agradece. El otro cambio ha sido pasar al peruano Luis Advincola de lateral a volante por la derecha. Se lo ve sólido, con proyecciones peligrosas y ya marcó dos goles. A eso Boca le suma la solidez de Sergio Romero en el arco y la velocidad más el gol del colombiano Sebastián Villa en la ofensiva. El xeneize es un equipo en ascenso y que busca su mejor forma. Tiene jerarquía en varios intérpretes, es un equipo con mucho carácter y llega entonado luego de un racimo de tres victorias consecutivas.
Almirón debe decidir quién reemplaza a Martin Payero en el mediocampo, expulsado en el clásico ante Racing. Son varios nombres que dispone el DT xeneize: Equi Fernández, Cristian Medina y el paraguayo Óscar Romero. La otra duda es qué disposición táctica tendrán sus dirigidos. ¿Desplegará una línea de 5 defensores, con laterales que se proyecten a la ofensiva? ¿O saldrá desde el inicio con cuatro defensores, 4 mediocampistas, sumando a Sebastián Villa y Luis Vásquez en la ofensiva?
El árbitro del encuentro será Darío Herrera, quien contará con Video Arbitraje Referee (VAR). Serán dos horas en las que gran parte de Argentina se detendrá para ver los movimientos de los jugadores con camisetas blancas con banda roja y azules con franja amarilla. Es el partido máximo de Argentina. La fiesta está asegurada afuera del estadio y la expectativa es tan enorme, que incluso trasciende las fronteras del país. Solo resta que brinden un gran espectáculo sus actores principales dentro del campo de juego para que la celebración contente a millones de hinchas.