(CNN Español) – Bastaron solo 35 días ―desde la confirmación de la llegada de Lionel Messi a la Major League Soccer (MLS, por sus siglas en inglés)― para que la ilusión se transmutara en un resonante éxito para su equipo.
El Inter Miami conquistó la Leagues Cup ―torneo en el que compiten conjuntos de esta liga de Estados Unidos y Canadá, más otros de México―, y con ello cristalizó un objetivo que conmueve los cimientos de la MLS. Demanda de tickets agotados en solo minutos para ver cada uno de los encuentros que disputó la Pulga, aumentó la suscripción para ver la MLS y especialmente los juegos de Messi y un frenesí de estrellas como el basquetbolista LeBron James, o la tenista Serena Williams, que fueron a ver al rosarino en su debut ante el Cruz Azul con la camiseta de las garzas.
Por si fuera poco, Messi e Inter Miami avanzaron a la final de la US Open Cup tras vencer en tanda de penales al FC Cincinnati luego de un dramático 3 a 3 en 120 minutos.
Gerardo Molina, un experto en marketing deportivo, dice que la decisión de Messi de optar por terminar su excepcional carrera futbolística en la MLS está cambiando el perfil del fútbol de Estados Unidos.
“(Esta liga) ya no es del retiro de los futbolistas, es una liga muy competitiva”, afirma.
“Nunca vi un deportista, ni siquiera un futbolista, que genere la magnitud de popularidad, de fama, prestigio que tiene Messi en todo el planeta”, reflexiona Molina, que analiza el ecosistema del fútbol durante más de 25 años.
Molina también subraya el aspecto familiar de Messi, al considerar que “humaniza las marcas”, y ha sido otro de los factores que posicionan al crack de Rosario como alguien que merece destacarse más alla del fútbol, por su comportamiento profesional y familiar.
Guillermo Tofoni, presidente de World Eleven, una empresa que tiene licencia de la FIFA para organizar partidos internacionales amistosos, considera que Messi es una especie de Mickey Mouse.
“Lo quiere todo el mundo, tanto los chicos como los grandes, y eso pasa en todas parte del mundo”, subraya.
El estruendo está motivando cambios en el paradigma del fútbol de Estados Unidos, sostiene Tofoni.
Messi en la MLS: un golpe en la mesa que aún requiere cambios
Fundada en 1993 y en competencia desde 1996, la MLS tuvo con el Mundial de Estados Unidos de 1994 una oportunidad que “no se transformó en el boom” que muchos esperaban para su fútbol, observa Tofoni. Ahora, remarca, nuevos retos implican aprovechar este viento a favor para posicionar a esta liga en el escenario mayor del fútbol internacional.
El experto considera que las contrataciones son un algo médular y apunta a su mirada a la Premier League, al explicar que los ingleses controlan la calidad de los futbolistas que llegan, no el tope salarial. Tofoni considera que regular el tope salarial del fútbol es algo que le pone un freno a la posibilidad de que lleguen más estrellas. En ese sentido sugiere imitar a la Premier League, donde la calidad de los futbolistas que contratan es el filtro que usa la liga inglesa. Eso asegura que el fútbol eleve su jerarquía tal como pasa hoy con la Liga Inglesa, dice Tofoni.
Por ello sostiene que, “deberían copiar el sistema de sus padres, los ingleses, creadores de este deporte y con quienes tienen un comercio muy fuerte”, añade.
Para el presidente de World Eleven, esta modificación permitiría que jugadores del nivel de la Champions League llegarán a la MLS, permitiéndole crecer en competitividad.
No obstante este aluvión con Messi, Gerardo Molina, especialista en marketing deportivo, dice que “no hay que subestimar” a la MLS, pues ya es la novena más valiosa del mundo , de acuerdo con información publicada por el sitio especializado Transfermarkt.
“El monto de la franquicia, monto y calidad de los jugadores, la competitividad, monto de los patrocinadores, el crecimiento de asistencia en los estadios y ahora sumándole la expansión que la MLS tiene con las transmisiones en Estados Unidos y a nivel internacional”, son los elementos por lo que una liga se posiciona en el mercado dice el Molina, autor de libros donde aborda la vinculación de empresas, patrocinios, futbolistas y clubes.
Calidad de los jugadores, fidelidad de sus hinchas e infraestructura
Molina resalta que los jugadores y el impacto que logren dentro y fuera de los estadios serán los elementos centrales para el posicionamiento de la liga.
Tofoni añade que contar con Messi es “la excusa perfecta” para abordar otro aspecto fundamental: la fidelidad de los hinchas. Pone como ejemplo lo que pasa en Argentina: “Si vos sos de River, sos de River; si sos de Boca, sos de Boca”, dice. Agrega que si se cambia todo el tiempo de club, no se le da identidad, lo cual “no es positivo”. Y concluye que ahora toca al Inter Miami imitar esto, pues sus hinchas se están identificando con el equipo.
Cuando una liga se torna competitiva, se nota por ejemplo en el brillo que adquiere la selección nacional. Tofoni asegura que eso no pasa con la selección de Estados Unidos. A su criterio, para que esto pase los clubes de la MLS deberían trabajar fuertemente en las fuerzas básicas, algo que hacen muchos de los países más poderosos en el fútbol.
Tofoni sostiene que las franquicias deberían desregularse para permitir que lleguen futbolistas de más calidad. Tan importante como eso, subraya Tofoni, es permitir que cada club o franquicia se le permita tener sus propios jugadores en categorías infantiles y juveniles. Esto le permitía tener su propia cantera de jugadores, lo cual - a criterio del empresario-, llevaría a que se traduzca en poder lograr una Selección Nacional más fuerte y competitiva.
En ese sentido, el empresario puntualizó que un CEO inglés seguramente “ordenaría” a la MLS en estos aspectos, o como por ejemplo, que la liga tenga un tope salarial mínimo para asegurar que “no contraten jugadores de escaso nivel tecnico”, remarca.
Ambos especialistas remarcan que la infraestructura de los estadios es buena, pero se impone en muchos casos ampliar su capacidad, al resaltar que el fútbol ahí está creciendo en popularidad.
Messi y 3 grandes torneos, oportunidad para crecer
Estados Unidos albergará la Copa América 2024 ―que organiza la Conmebol―, el Mundial de Clubes ―que organiza la FIFA con 32 equipos―, y en 2026 el ente rector del fútbol mundial realizará la Copa del Mundo en Canadá, Estados Unidos y México. Con ese horizonte, a la MLS no le queda otra que crecer, sostienen ambos expertos.