(CNN Español) – Este viernes se cumple el primer año de la muerte de la Isabel II, quien falleció a los 96 años en el castillo de Balmoral, en Escocia. Sus 70 años en el trono le valieron el título de la monarca con el reinado más largo de su historia y, para muchos en Reino Unido, ella fue la única reina a la que conocieron.
Su muerte dio paso al ascenso del rey Carlos III, lo que desató cuestionamientos sobre si lograría la aceptación, apoyo y simpatía que logró la soberana y mantener una monarquía estable y relevante en estos tiempos.
Después de un año de la muerte de Isabel II es momento de recapitular cómo le ha ido al rey Carlos III y a la familia real. Estos son algunos de los acontecimientos más importantes que ocurrieron en estos 365 días.
El ascenso del rey Carlos III
El heredero al trono fue proclamado formalmente como nuevo monarca del Reino Unido el 10 de septiembre de 2022, convirtiéndose automáticamente en jefe de Estado de Gran Bretaña y de otros 14 reinos de la Mancomunidad británica, incluidos Australia y Canadá.
En su discurso, Carlos III rindió homenaje a su madre y habló de “la gran herencia y los deberes y pesadas responsabilidades de Soberanía” que le habían sido conferidos.
Aseguró que se esforzaría por seguir el ejemplo inspirador al defender el gobierno constitucional y buscar la paz, la armonía y la prosperidad de los pueblos de las islas, Reinos y Territorios de la Mancomunidad en todo el mundo.
Pero no todo fue celebración. Su ceremonia de coronación se vio opacada por las protestas en las que manifestantes portaban camisetas amarillas y coreaban consignas como “no es mi rey”.
El grupo antimonárquico Republic afirmó en redes sociales: “En lugar de una coronación queremos una elección. En lugar de Carlos queremos una elección. Así de simple”.
Carlos III heredó un país descontento por la caída en el nivel de vida y de los salarios, que no podían seguirle el paso a la alta inflación, que se sumaba a los efectos del brexit y los llamados a huelgas y protestas por parte de diferentes gremios de trabajadores.
La aprobación de Carlos III y de la familia real
Un sondeo realizado por CNN en mayo pasado señala que, en la última década, la opinión sobre la familia real se ha vuelto más negativa para el 36% de los adultos en el Reino Unido, mientras que para el 21% las opiniones se han vuelto más positivas y un 41% dijo que su opinión se había mantenido.
Y destaca un dato curioso: el rey Carlos III no es el más querido de la monarquía. Ese lugar lo ocupan los ahora príncipes de Gales, William y Kate, con una aprobación del 62%, le siguen el rey Carlos con el 49% y la reina Camila con el 34%. Harry y Meghan tienen el 26% y 22% de aprobación, respectivamente.
Otra encuesta de Ipsos en abril de este año mostraba que el 49% de los encuestados sostenía que Carlos realiza “un buen trabajo” como monarca, mientras que el 32% dice que “no hace ni bien ni mal su trabajo” y el 9% afirmaba que hace “un mal trabajo”.
Si bien se trata de casi la mitad de la población, ese porcentaje fue mucho menor al obtenido tras su proclamación como rey, cuando alcanzaba el 61% de respaldo.
La misma encuesta reveló que un 47% cree que la familia real no está en contacto con la gente común, comparado con un 33% que opinó lo contrario.
La división al interior de la familia real
Uno de los retos que enfrenta Carlos III es poner orden en casa como jefe de familia y monarca a cargo de una institución con claros signos de debilidad y credibilidad.
El monarca heredó la partida de algunos de sus miembros, escándalos públicos originados por acusaciones de abuso sexual y racismo que afectaron su imagen.
Desde que los duques de Sussex, Harry y Meghan, anunciaron en 2020 su salida como miembros a tiempo completo de la familia real y su partida fuera del Reino Unido, se habla de la difícil relación entre Harry y el rey que no ha podido restablecerse al año de la muerte de la reina Isabel II.
Además, está la relación de Harry con su hermano, el príncipe William. A inicios de este año se publicó “Spare” o “En la sombra”, el libro de memorias del duque de Sussex, que incluye el relato de Harry sobre una pelea con el príncipe William que le dejó “lesiones visibles”.
La autobiografía habla de reproches, críticas y agravios de la época de Harry como miembro principal de la familia real, y detalles de su separación. Y señala la preocupación de Harry y William de que su padre se casara con Camila, ahora reina consorte. El Palacio de Buckingham permaneció en silencio tras la publicación.
Las actividades de la familia real
Los príncipes de Gales, William y Kate, han estado presentes en más actividades oficiales representando a Carlos III. Son parte de distintos proyectos con organizaciones benéficas.
William hizo en marzo pasado un inusual viaje a Polonia, donde se reunió con tropas británicas y polacas cerca de la frontera con Ucrania. Y se reunió con miembros de las Fuerzas Armadas británicas para saber cómo han colaborado con sus homólogos polacos.
Los príncipes también asistieron a un concierto de villancicos en diciembre pasado, viajaron a Boston, Estados Unidos, para la entrega de premios Earthshot, que distingue soluciones innovadoras a problemas ambientales. Y han dedicado esfuerzos a combatir el problema de las personas sin hogar en el Reino Unido.
William ha sido visto en otros actos más informales como sirviendo hamburguesas ecológicas en Londres o respondiendo el teléfono en un restaurante en Birmingham.
Por otra parte, la princesa Ana y el conde de Wessex se convirtieron en consejeros de Estado a petición del rey. Este cambio les permite a ambos reemplazar al monarca temporalmente cuando sea necesario.
La vida de Harry y Meghan en California
Desde que los duques de Sussex renunciaron a sus deberes reales, la tensa relación que existe con la familia real quedó expuesta públicamente.
Si bien la pareja asistió al funeral de Isabel II e hicieron algunas apariciones conjuntas con los príncipes de Gales, William y Kate, fueron “desinvitados” a una recepción en el Palacio de Buckingham para Jefes de Estado e invitados oficiales en el extranjero antes del funeral de la monarca debido a un “error” de la administración, dijo a CNN una fuente con conocimiento de los hechos.
Harry asistió solo a la coronación de su padre. Su esposa Meghan y sus hijos Archie y Lilibet no asistieron a la ceremonia. El príncipe tampoco fue visto en el balcón del Palacio de Buckingham para saludar al público junto a la familia real.
Desde entonces han ocurrido una serie de eventos controvertidos, incluida la acusación de Harry a la reina Consorte, Camila, de filtrar historias sobre la familia a los medios británicos como parte de su campaña para “rehabilitar” su imagen.
En una entrevista a CBS afirmó que Camila era “peligrosa” porque la prensa la había catalogado como una “villana” por su papel en el colapso del matrimonio de sus padres y necesitaba “rehabilitar su imagen”.
En marzo pasado, los duques de Sussex recibieron una petición para desalojar Frogmore Cottage, su residencia oficial en el Reino Unido.
A esto se sumó la autobiografía de Harry con reveladoras declaraciones hacia su hermano William y el documental de Netflix de seis partes en el cual el príncipe compara a Meghan con Diana y critica el “sesgo inconsciente” de la realeza. El Palacio de Buckingham no hizo comentarios al respecto.
Con información de Jennifer Agiesta, Rob Picheta, Ariel Edwards-Levy and Sana Noor Haq, Max Foster, Lauren Kent, Lauren Said-Moorhouse, Amy Woodyatt y Caludia Rebaza de CNN