(CNN) – Un padre de Virginia Occidental finalmente percibe una sensación de cierre después de que las autoridades encontraran los restos de su pequeña hija y su madre luego de una confesión en el lecho de muerte del hombre que se cree que les disparó fatalmente hace más de dos décadas.
Benjamin Hatfield, fiscal del condado de Raleigh, lo llamó “un final un poco poético que ni siquiera yo podría escribir”, durante una conferencia de prensa este martes.
En una confesión “detallada, innegable y sin conflictos” que hizo en el lecho de muerte a uno de los investigadores del caso a principios de este mes, Larry Webb admitió haber matado a tiros a Natasha “Alex” Carter, que tenía 10 años en ese momento, y a su madre, Susan Carter, hace casi 24 años, dijo Hatfield.
En el año 2000, los Carter vivían en la casa de Webb, dijeron las autoridades. Webb le dijo al investigador que parte del dinero que tenía en la casa había desaparecido y sospechaba que Susan Carter había “gastado mucho dinero. Discutieron al respecto y él le disparó”, continuó Hatfield. Webb dijo que sintió que entonces no tenía más remedio que dispararle a Alex, “para evitar que lo descubrieran por haber matado a Susan”.
Webb le dijo al investigador que guardó sus cuerpos en el sótano de su casa y, en el transcurso de dos noches, cavó una tumba poco profunda en el bosque de su propiedad, dijo Hatfield, donde enterró a las dos juntas.
El padre de Alex, Rick Lafferty, dijo este martes que era “un día un poco triste, pero también un día feliz porque pude traer a mi bebé a casa”.
“Han pasado unos 24 años y este caso quedó sin resolver muchas veces”, añadió Lafferty. “Casi pierdo la esperanza varias veces”.
Webb había sido un sospechoso desde el inicio de la investigación, dijeron las autoridades.
En octubre de 2023, Webb fue acusado de homicidio calificado por la muerte de Alex, pero ni el cuerpo de Carter ni el de Alex habían sido encontrados en ese momento. Antes de la acusación, los investigadores tenían pruebas de ADN y declaraciones de testigos, dijo Hatfield.
Pero tras la acusación, “debido a la salud de Larry Webb, el proceso judicial se retrasó por diversos motivos. Lo trasladaron a un asilo de ancianos. Tuvimos problemas con el transporte”, dijo Hatfield. “Tuvimos problemas para obtener su autorización médica para que sea encarcelado. (…) Fue un poco difícil avanzar en el proceso judicial en las primeras etapas”.
Antes de una cita en la corte a principios de este mes, uno de los investigadores pudo hablar con Webb en su hogar de ancianos, según Hatfield. Webb confesó los asesinatos, y detalló su motivo y la ubicación de los cuerpos en la parte trasera de su propiedad, dijo Hatfield.
“La confesión se alineó exactamente con los esfuerzos de investigación y las pruebas recopiladas” por las autoridades, señaló Hatfield.
Las autoridades comenzaron los esfuerzos de excavación el 9 de abril, según Hatfield, pero fue un “proceso difícil” ya que la descripción que hizo Webb del lugar “era limitada” y “empañada por la memoria y la salud física y mental de ese momento”.
Ese día, los investigadores llevaron a Webb al lugar de la excavación, pero su salud se había deteriorado tanto que resultó ineficaz, dijeron.
Webb fue trasladado de la unidad de cuidados paliativos del Complejo Correccional Mount Olive, donde estaba encarcelado, al Hospital General de Montgomery, donde murió este lunes por la mañana, dijo Hatfield.
Horas más tarde, se encontraron los cuerpos de Susan y Alex Carter, dijo Hatfield.
La investigación está en curso y los restos se encuentran en la oficina del forense, dijeron las autoridades.
Este martes, Lafferty ofreció algunos consejos para cualquiera que se encuentre en su posición: “Nunca te rindas. Nunca pierdas la esperanza de encontrar a tu hijo”.