GIGLIO, Italia (CNN) — En sus respuestas a los fiscales, abogados defensores y a un juez, el capitán del crucero Costa Concordia admitió que cometió un “error” que llevó al barco a colisionar con las rocas frente a la isla italiana de Giglio.
Sin embargo, en declaraciones hechas durante una conversación telefónica con un amigo a principios de mes, el capitán Francesco Schettino dijo que fue presionado por funcionarios de la compañía para llevar el barco muy cerca de la isla, reportaron dos diarios italianos este miércoles.
Costa Cruises y las autoridades han criticado el comportamiento de Schettino, quien se encuentra bajo arresto y enfrenta posibles cargos de homicidio imprudencial, naufragio y abandono de barco por el incidente ocurrido el pasado 13 de enero.
El cuerpo de la víctima número 16 fue localizado este martes. Otros 16 permanecen desaparecidos.
Unas 4,200 personas se encontraban a bordo al momento de la colisión, 3.200 pasajeros y 1.000 integrantes de la tripulación.
“Yo golpeé este saliente de roca, que parece que casi se atascó en el barco, pero este fue mi error”, dijo Schettino, según la transcripción de 126 páginas. “No hay nada que pueda decir, estaba convencido de que por pasar a unos 450 no habría problemas”.
El capitán también matizó las acusaciones de los fiscales de que iba muy rápido, a unos 15 nudos de velocidad. “No hay un límite de velocidad”, dijo. “Teníamos más o menos la velocidad necesaria para llegar a Savona a tiempo”.
Schettino dijo, según la transcripción, que llevó el barco a la costa para evitar que se hundiera. “Eso me permitió limitar la inclinación”, dijo.
El abogado marítimo Jim Allsworth dijo a CNN que la maniobra es “la estándar” en el caso de que un barco tenga una entrada de agua o peligro de hundirse. “Lo mejor es encallarlo para evitar que se hunda”, explicó.
Los diarios italianos La Repubblica y Corriere della Sera publicaron este miércoles extractos de una conversación telefónica entre Schettino y un amigo, después de que fue arrestado el 14 de enero.
El capitán llamó a su amigo de la oficina del fiscal, desde un teléfono intervenido por las autoridades, según los diarios. El abogado de Schettino, Alessandro Antichi, confirmó la intervención y dijo que no comentaría sobre la conversación.
La información no debió publicarse, dijo, es parte de la investigación.
“En mi lugar, alguien más no habría sido tan benevolente para ir ahí, porque me habían molestado, ve, ve ahí”, dijo Schettino, en una referencia aparente a una instrucción para acercarse a la isla, de acuerdo con los diarios. “El encalladero estaba ahí, pero no estaba señalado por los instrumentos que tenía y seguí adelante… para seguir lo que los directores querían”.
El hombre detrás del timón, Jacob Rusli Bin, dijo a los investigadores que después de que el barco golpeó con las rocas, Schettino maldijo y dijo que no las había visto, según La Repubblica.
En su declaración, Schettino defendió su decisión de no evacuar el barco inmediatamente.
“No puedo bloquearme y decir inmediatamente: ‘Hay que salir de aquí’”, dijo. “¿A dónde envío a esta gente? Necesito tener la certeza y decidir con base a que el barco está así (que ya no es capaz de flotar). Y no voy a arriesgar la vida de 4.000 personas”.
Los pasajeros del crucero han descrito escenas de pánico y confusión mientras buscaban salvavidas. Algunos dicen que la tripulación parecía abrumada y no tenía información exacta sobre lo que estaba sucediendo.
Schettino también describió el caos en su transcripción y dijo que había ayudado a los pasajeros a llegar al os botes salvavidas, y que algunos se atoraron por el ángulo del barco. Dijo que estaba tratando de lanzar un salvavidas cuando se dio cuenta de que ya no estaba a bordo.
“Estaba entonces en un bote salvavidas. No es como que yo lo abordé”, dijo. “Mira, me caí en el techo”.
Sin embargo, en la conversación intervenida por las autoridades, Schettino le dice a un amigo: “Bueno, entiendo que el barco se estaba inclinando, decidí dejarlo y lo dejé”, de acuerdo con Corriere della Sera.
Un capitán que deja el barco con pasajeros aún a bordo es difícil de defender, dijo el abogado italiano de defensa criminal Ugo Meucci, quien no representa a Schettino.
“Esta es una posición muy difícil porque nuestra ley es muy fuerte, ye l riesgo es muy alto para el capitán”, quien podría enfrentar una sentencia de 15 años de cárcel, dijo Meucci.
Schettino ha defendido sus acciones después de que el barco golpeó las rocas e insiste en que sus jefes de la empresa Costa sabían sobre la severidad del accidente.
“La ruptura (en el barco) era inmensa”, dijo el capitán en la conversación intervenida. “Estaba este saliente de la roca, y después todo lo que hice después, hice todo con el mayor profesionalismo, y esto puede ayudarme a aliviar o al menos darme la ilusión de estar en paz con mi conciencia”.
“Estoy orgulloso del hecho de que salvamos a la mayoría (de los pasajeros)”, dijo a su amigo. “Di vueltas para buscar a gente en el mar y estoy en paz”.
Schettino también dijo a su amigo: “No quiero nunca volver a un barco”.