El presidente Joe Biden habla con los periodistas después de asistir a la iglesia en Rehoboth Beach, Delaware, el 31 de agosto de 2024.

(CNN) – El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reaparece en la campaña electoral esta semana, y entra en una nueva fase política mientras cierra su etapa en la Casa Blanca y trabaja para garantizar que la vicepresidenta, Kamala Harris, le suceda.

Biden y Harris iniciarán juntos la carrera final hacia las elecciones el Día del Trabajo, aprovechando la festividad para atraer a los votantes de clase trabajadora con un acto en un local sindical de Pittsburgh, una demostración de fuerza simbólica en una ciudad a la que el propio Biden acudió a menudo en momentos clave de su carrera política.

Los viajes de campaña de Biden se producen también en el contexto de los últimos acontecimientos en Medio Oriente, después de que el Ejército israelí recuperara los cadáveres de seis rehenes que, según afirma, fueron asesinados por Hamas en Gaza. Entre ellos se encuentra el israelí-estadounidense Hersh Goldberg-Polin, con cuyos padres hablaron Biden y Harris este domingo.

El regreso a la campaña, cuidadosamente elaborado, se produce en un momento en el que el presidente está pasando de candidato a sustituto tras abandonar su propia candidatura a un segundo mandato. Biden dijo a los periodistas que está deseando volver a la campaña tras dos semanas de vacaciones en California y Delaware. Según fuentes conocedoras de la situación, sus asesores han pasado las últimas semanas esbozando sus planes de campaña para el otoño, con el fin de pulir su legado.

El presidente se perfila con una hoja de ruta inicial que recorre Pensilvania, Wisconsin y Michigan durante los próximos cinco días, visitando los estados críticos del “muro azul” en los que venció por estrecho margen al expresidente Donald Trump en 2020. Incluirá una mezcla de actos de campaña y oficiales para promover temas populares de su agenda, ofreciendo un esquema de cómo se desplegará en los próximos meses.

Su reincorporación también coincide con la reducción de las apariciones públicas de Harris, que se centra en la preparación del debate presidencial del 10 de septiembre. Biden la sustituirá esta semana en los principales estados en disputa.

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Joe Biden llama a votar por Kamala Harris para que pueda enfrentar la codicia financiera que busca Trump
03:30 - Fuente: CNN

Se espera que Biden, que ha experimentado un pequeño repunte en su índice de aprobación en algunas encuestas desde que terminó su campaña de reelección, pase una cantidad sustancial de tiempo en Pensilvania, el estado donde nació y donde sus aliados esperan que su capital político pueda ayudar a Harris. Es un estado en el que Biden cree que la vicepresidenta “tiene que ganar”, y ha indicado que ha hablado con el gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, sobre la posibilidad de iniciar una gira por la comunidad.

Los aliados demócratas también creen que Biden seguirá teniendo influencia entre los votantes de cuello azul y los votantes de más edad, que constituyeron un bloque importante del apoyo del presidente en su candidatura de 2024, incluso cuando vio disminuir el apoyo de otros grupos clave.

Existe una estrecha coordinación entre el Ala Oeste, la oficina de la vicepresidenta y la campaña sobre los planes para llevar a Biden de gira allí donde sea más útil, dijo una fuente familiarizada con el asunto. El lugar exacto y la frecuencia de su despliegue podrían evolucionar a medida que avance la contienda, dijeron las fuentes, ya que la campaña de Harris se enfrenta a un período truncado para presentar sus argumentos a los votantes.

También se están manteniendo conversaciones para determinar cómo se puede utilizar al presidente en el circuito de recaudación de fondos en otoño, dijeron las fuentes.

Los equipos aún tienen que determinar la frecuencia con la que Biden y Harris harán campaña juntos, y un aliado dijo que podría haber un enfoque de “divide y vencerás” en el período previo al día de las elecciones.

El presidente ha indicado que está dispuesto a hacer lo que sea necesario en la campaña, dijo una fuente familiarizada con la dinámica, porque en opinión de la Casa Blanca, ha hecho “una gran apuesta” al hacerse a un lado, “y tiene que funcionar”.

Biden celebrará esta semana actos en la Casa Blanca en una zona rural del suroeste de Wisconsin, donde se centrará en las inversiones en empleos de energías limpias y los esfuerzos para combatir el cambio climático, y en Michigan, donde destacará la creación de empleo en una comunidad local.

El presidente de EE.UU., Joe Biden, y la vicepresidenta y candidata presidencial demócrata para 2024, Kamala Harris, en la Convención Nacional Demócrata en Chicago el 19 de agosto de 2024.

“Va a participar realmente en la campaña y exponer lo que ha hecho el Gobierno. Esa es una de las cosas clave que hay que destacar”, dijo el exsenador por Delaware Ted Kaufman, amigo íntimo y asesor de Biden desde hace mucho tiempo. “Hay que ponerse manos a la obra”.

Pero podría resultar una línea muy fina para los demócratas, ya que los republicanos están ansiosos por vincular a Harris con lo que consideran políticas fallidas de Biden en temas como la inmigración y la economía, áreas en las que Trump ha obtenido mejores resultados en las encuestas durante toda la campaña.

Aunque ha defendido una “nueva forma de avanzar”, Harris aún no se ha distanciado del historial de Biden en política interior o exterior. Pero ha recurrido a diferentes estrategias de comunicación, incluido un discurso económico centrado en la accesibilidad en torno a cuestiones como los precios de los alimentos y la vivienda.

En una entrevista concedida a CNN la semana pasada, Harris defendió la trayectoria económica del presidente y eludió las preguntas sobre por qué no ha actuado en los nuevos asuntos que propone en campaña durante su mandato como vicepresidenta.

“Teníamos que recuperarnos como economía, y lo hemos hecho”, dijo, señalando su trabajo con Biden para reducir la inflación y bajar los costes de los medicamentos con receta.

“Queda más por hacer, pero es un buen trabajo”, afirmó.

Harris también elogió a su excompañero de fórmula, diciendo a CNN que Biden “tiene la inteligencia, el compromiso, el juicio y la disposición que creo que el pueblo estadounidense merece en su presidente”.

Hacer el trabajo

Además de tratar de impulsar la candidatura de Harris, el presidente también está aprovechando este periodo para centrarse en objetivos clave de política interior y exterior que quiere abordar antes de dejar el cargo,

Ben LaBolt, director de comunicaciones de la Casa Blanca, dijo que el presidente se “inclinará fuertemente” a hacer campaña por Harris al tiempo que se centra en gobernar.

“La agenda será intensa, y tiene previsto dejarlo todo sobre el terreno para conseguir el mayor progreso posible para los estadounidenses que trabajan duro, ya sea mediante la acción ejecutiva o legislativa”, afirmó LaBolt.

Biden ha presionado a su equipo para que se centre en la aplicación de la legislación clave y los esfuerzos para reducir los costos, junto con el trabajo en temas de legado como la iniciativa “Cancer Moonshot”, el apoyo a los veteranos, la lucha contra la violencia armada y la administración de la inteligencia artificial, entre otras prioridades.

Trabajar para poner fin al conflicto entre Israel y Hamas sigue siendo una prioridad clave para el presidente, que recientemente ha hecho sendas llamadas a los líderes de Israel, Egipto y Qatar para impulsar los esfuerzos por alcanzar un alto el fuego y un acuerdo sobre los rehenes.

“Es hora de que esta guerra termine”, dijo Biden el sábado. “Creo que estamos a punto de llegar a un acuerdo. Es hora de ponerle fin. Es hora de terminarla”.

La guerra en Ucrania es también uno de los temas principales de la agenda de Biden en sus últimos meses en el cargo. Recientemente habló con el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, que envió altos funcionarios a Washington la semana pasada.

También se espera que el presidente, que ya no se ve limitado por las exigencias de la campaña electoral, viaje al extranjero, considerando viajes a Polonia, a la cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico en Perú, a la cumbre del G20 en Brasil y a África, donde lleva tiempo prometiendo una visita. También se espera que asista a la reunión anual de la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York el mes que viene.

Para Harris puede ser beneficioso tener a Biden en la escena mundial reuniéndose con sus pares y reafirmando el liderazgo de Estados Unidos.

“La está preparando para el éxito al refrescar esas relaciones, y nadie lo hace mejor que él”, declaró un antiguo funcionario estadounidense.

Cómo podría ayudar Biden

Con su decisión de hacerse a un lado, Biden ha hecho la transición de principal a sustituto, reconociendo la nueva dinámica en sus declaraciones en la Convención Nacional Demócrata el mes pasado.

“Prometo que seré el mejor voluntario que la campaña de Harris-Walz haya visto jamás”, dijo.

El servicio y el legado de Biden fueron ampliamente elogiados aquella noche en Chicago, pero los tres días siguientes de programación de la convención giraron en torno al futuro del partido. Aún así, mantiene su popularidad entre algunos grupos demográficos clave que serán decisivos en noviembre.

Aunque se vio obligado a retirarse de la carrera de 2024 por preocupaciones sobre su edad y su capacidad para hacer campaña, algunas encuestas han mostrado que los índices de aprobación de Biden han subido. El índice de aprobación del presidente se sitúa en el 41%, según la encuesta de CNN Polls, frente al 37% de julio.

“Va a ser un sustituto especialmente poderoso para la vicepresidenta porque es muy querido y será muy recordado”, dijo Mitch Landrieu, copresidente de la campaña de Harris que trabajó con el presidente y la vicepresidenta en la Casa Blanca. “Su acto desinteresado de dimitir le ha dado una credibilidad increíble”.

Biden, ha dicho la presidenta de AFL-CIO, Liz Shuler, en una entrevista con CNN, será “el defensor definitivo” de Harris ante los trabajadores afiliados a sindicatos. Shuler ha señalado que 1 de cada 5 votantes en los estados del muro azul Michigan, Wisconsin y Minnesota son votantes sindicados, y que el 22% de los votantes de Pensilvania son votantes sindicados, un grupo que favorece rotundamente a Harris.

“Biden sería muy motivador para la gente, y sería un recurso más que la campaña tendría en su caja de herramientas”, dijo Shuler.

Biden también será un sustituto clave de Harris entre los votantes de más edad. Si bien perdió terreno con varios grupos demográficos clave mientras estaba en la carrera de 2024, el presidente hizo avances significativos con los votantes de más edad, un grupo que típicamente ha votado por los republicanos.

En su primer evento juntos después de que Biden se retirara de la carrera, el presidente y la vicepresidenta se centraron en la capacidad de Medicare para negociar el precio de los medicamentos recetados, un tema que podría resonar entre los votantes mayores.

CHICAGO, ILLINOIS - AUGUST 19:  U.S. President Joe Biden speaks onstage during the first day of the Democratic National Convention at the United Center on August 19, 2024 in Chicago, Illinois.  Delegates, politicians, and Democratic party supporters are in Chicago for the convention, concluding with current Vice President Kamala Harris accepting her party's presidential nomination. The DNC takes place from August 19-22. (Photo by Justin Sullivan/Getty Images)
"No podía quedarme a un costado": Joe Biden explica qué lo motivó a postularse a la presidencia en 2020
02:47 - Fuente: CNN

El factor Pensilvania

Biden no ha ocultado lo importante que será Pensilvania en las elecciones de noviembre. Él movió el estado de nuevo a la columna azul en 2020, superando a Trump allí por menos de 2 puntos porcentuales.

“Tenemos que ganar Pensilvania, mi estado natal original. (Shapiro) y yo estamos organizando una gira de campaña en Pensilvania”, dijo Biden en una entrevista con “Sunday Morning” de CBS el mes pasado. “También voy a hacer campaña en otros estados. Y voy a hacer lo que Kamala crea que puedo hacer para ayudar más”.

La victoria de Biden en 2020 se derivó de recabar apoyos en la zona de Filadelfia y apelar a los votantes del oeste y el noreste del estado, incluida la zona donde se encuentra su querida Scranton.

“Joe Biden, creo, demostró ser el único capaz de recuperar a los carpinteros, camioneros, obreros que se habían alejado hacia Trump en 2016”, dijo Conor Lamb, excongresista por Pensilvania, sobre el trabajo de Biden en las regiones noreste y oeste del estado.

El presidente y la vicepresidenta harán campaña juntos en el condado de Allegheny, donde la campaña de Biden vio crecer su apoyo en 2020 en comparación con la de la excandidata demócrata Hillary Clinton contra Trump un ciclo antes.

También es un área que ha ayudado a dar forma a la carrera política de Biden.

En 2015, corrió por la ruta de un desfile del Día del Trabajo en el centro de Pittsburgh al grito de “¡Corre, Joe, corre!” en un momento en que estaba sopesando una entrada tardía en las primarias demócratas. Al final decidió no lanzar una campaña, ya que seguía lidiando con la muerte de su hijo Beau.

Biden volvió a ese mismo desfile del Día del Trabajo cuando meditaba presentarse a las elecciones de 2020. Y en Pittsburgh es donde empezó y terminó esa carrera hacia la Casa Blanca: empezó con un mitin con trabajadores sindicales en abril de 2019 y volvió en la víspera de las elecciones para un mitin automovilístico al aire libre con Lady Gaga.

Ahora Biden volverá a esa ciudad al entrar en un nuevo capítulo de sus más de cinco décadas en política, buscando impulsar a su sucesora elegida Harris, de quien ha dicho que será “una presidenta increíble”.