¿Cómo defendió la oposición las actas de las elecciones presidenciales de Venezuela?
(CNN Español) -- La oposición venezolana asegura que ganó las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio. Incluso, la líder opositora María Corina Machado ha dicho que el candidato Edmundo González Urrutia es el presidente electo del país. Esta declaración se sostiene en las actas de votación publicadas por el Comando con Venezuela tras conocerse los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE), que, sin mostrar los resultados detallados por centro y mesa de votación, dio como ganador de la contienda al presidente Nicolás Maduro.
Estas actas, que hoy están a disposición del público a través de la página web resultadosconvzla.com, corresponden al 83,50% de los comprobantes emitidos, y fueron recopiladas por miles de voluntarios durante la jornada electoral como testigos de la oposición.
El miércoles, la Fiscalía de Venezuela anunció que abrió una investigación por supuesta conspiración y otros delitos contra los responsables de la web que publica las actas electorales, cuyos resultados han sido también verificados por organizaciones civiles y medios de comunicación independientes.
CNN entrevistó a tres de esas personas que, antes de las elecciones, dijeron que trabajarían como testigos de la oposición, y ahora relatan cómo trabajaron para obtener y resguardar la impresión de la máquina de votación en la mayoría de las 30.026 mesas que dispuso el CNE para los comicios. Todos pidieron resguardar su identidad por temor a represalias.
Una pensionada dice que llegó a las 3 de la madrugada a su centro electoral, donde votaban 226 personas, tres horas antes de que comenzara el proceso. Ella cuenta que su lugar de votación era uno de esos nuevos centros electorales que anunció el CNE en una reestructuración que se hizo justo antes de la elección. Tenía una sola mesa.
Esta testigo afirma que en su lugar de votación la jornada transcurrió en tranquilidad, sin incidentes mayores. La mesa se abrió un poco antes de la 6 de la mañana y cerró a las 6:10 de la tarde. Luego de ello, asegura, comenzó la transmisión de los datos. "Al momento de imprimir las actas el sistema colapsó y tardó como hora y media", recuerda.
Según la normativa electoral, cada testigo tiene derecho a recibir un acta y así se hizo. Como representante de la Plataforma Unitaria, ella recibió una, el representante del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), la tolda del Gobierno, otra, al igual que la presidenta de la mesa electoral y los representantes de otras organizaciones políticas presentes.
Después de la impresión de las actas se contaron los comprobantes del voto que reposaban en la urna. En un pizarrón, recuerda, ella, el resto de los testigos y el personal asignado al centro escribieron el nombre de cada candidato. “El centro queda en una zona chavista y el ganador fue Edmundo González”, aseguró.
Explica que su trabajo fue obtener esa acta, resguardarla y entregarla a su coordinador. “No tengo las actas en mis manos. El lunes se la entregué a la coordinadora, quien tenía que entregarla porque ese era mi aval”.
La logística
Otra venezolana que reside en el oeste de Caracas, quien declara no tener filiación política directa, formó parte de los llamados comanditos. “Quería apoyar”, dice a CNN.
Ella dice que fue la coordinadora de 10 personas que, a su vez, fueron testigos en dos parroquias de raigambre popular en el oeste de la capital venezolana. "Fuimos muy cuidadosos porque conocemos cómo se maneja el régimen”, asegura.
Según esta opositora al Gobierno de Venezuela, la indicación era estar entre 3 y 4 de la mañana en los centros electorales, antes del comienzo del proceso, para coordinar desde el inicio hasta el cierre y “blindar las actas hasta donde tenían que llegar”.
“El proceso fue complicado, no querían cerrar los centros o dar las actas”, recuerda.
La opositora dijo que fue un proceso duro y complicado, "pero se pudo lograr gracias a la gente que estuvo allí".
Explicó que hubo lugares donde la oposición no tenía testigos. En algunos centros electorales no estuvieron porque funcionaron en lugares controlados por los consejos comunales, instancias creadas por el chavismo en 2006 y que coordina los esfuerzos de autogestión para mejorar la infraestructura de las zonas populares. La mayoría, dice ella, son cercanos al Partido Socialista Unido de Venezuela.
“El trabajo fue bastante complicado, pero cooperativo, y todavía lo estamos haciendo. Las actas aún se están enviando a un sitio seguro”, asegura.
Dice que nadie de su grupo de testigos ha sido arrestado.
“Algunos están resguardados porque tienen miedo. Nosotros recuperamos las actas. Se sacaba la foto y se enviaba a un punto donde se hacía el escaneo”, explica y añade: “Miedo tenemos todos aquí en Venezuela y más los que trabajan en este proceso electoral, pero hay fe y la esperanza de que lo vamos a lograr”.
La semana pasada María Corina Machado decidió limitar sus apariciones en público precisamente por temor a una detención. La líder opositora se ha mantenido en las últimas horas dando entrevistas a la prensa nacional e internacional y comunicándose a través de las redes sociales.
Los voluntarios tenían indicaciones claras: llegar hasta el final de la jornada, presenciar el proceso de escrutinio, que supone el conteo de votos y su comparación con el acta emitida por la máquina de votación, y finalmente obtener esa acta firmada, que es reflejo de la principal.
En Venezuela, cada representante de partido político participante obtiene una respaldo que puede conservar. El acta principal queda en manos del Consejo Nacional Electoral y pasa a resguardo del Plan República, un operativo liderado por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana para cuidar del material electoral- en un sobre.
"Todos saben lo que pasó"
Otra venezolana se identifica como "movilizadora" le dijo a CNN que le tocó supervisar 10 centros electorales en Caracas y recibir las actas recopiladas por los testigos.
Ella es miembro de un partido político de oposición y dice ser líder dentro su comunidad.
Cuenta que fue una jornada llena de obstáculos aún antes del día de la elección. “Al principio tuvimos muchas trabas, inconvenientes para las credenciales, trataron de hacer que algunos testigos no entraran en el centro de votación”.
“Nuestros testigos se presentaron a las 4:00 am”, relata. “Había miembros de mesa que no se presentaron y los consejos comunales querían ocupar esos espacios”.
Esta mujer dice que las cosas han cambiado en los últimos años en Venezuela, durante los cuales, según su criterio, la oposición ha ido ganando terreno en las zonas pobres.
“Esta era una zona asediada por los colectivos (grupos de civiles armados identificados con el chavismo). Esta vez eso no ocurrió, la gente estaba participando”.
Recuerda que a las 6 pm, cuando correspondía culminar la votación, los colectivos impedían el cierre del proceso.
“Los ciudadanos salieron a las puertas de los centros a apoyar a los testigos y ver la verificación”. Para esta voluntaria, esa fue la clave para garantizar los resultados.
El resguardo de las actas
Con la llegada de la tarde y el cierre de mesas, se iniciaba el proceso de escrutinio de los resultados. Los testigos que pudieron pasar tuvieron la oportunidad de ver cómo se contaban las papeletas de las cajas, cómo se comparaban con el acta de la máquina y se imprimían los comprobantes.
“La instrucción era tomarle la foto al acta con el código QR y enviarlo donde se tenía que enviar. Aquí, a las 12 del mediodía del lunes, habíamos recogido el 90% de las actas”.
La mujer no reveló adónde envió el acta por razones de seguridad.
Esta dirigente opositora dice con alivio que nadie de su grupo ha sido detenido. “El temor existía y existe, hay gente que tiene miedo, tratan de quebrarte, te persiguen nada más por ser opositor”.
Para ella no hay duda del resultado, dice sin vacilar que Edmundo González Urrutia ganó la elección. “Nosotros y todos lo que están aquí saben lo que pasó. Ellos vieron lo mismo que nosotros y saben lo que pasó. La gente lo sabe”.
Y, en su opinión, no solo los testigos civiles tienen la certeza de la victoria del candidato de la Plataforma Unitaria Democrática. La tienen también, dice, los militares del Plan República que resguardaron la infraestructura electoral.
“Como ciudadanos entendimos que debemos empoderarnos de la democracia”. No sé cómo va a terminar esto, pero tengo fe de que va a terminar bien”.