Soldados en Ucrania dicen que los tanques suministrados por EE.UU. los convierten en blanco de ataques rusos
Ucrania oriental (CNN) -- Las tripulaciones ucranianas que trabajan con los tanques Abrams, suministrados por Estados Unidos, informaron a CNN de una serie de puntos débiles y defectos de los blindados, que ponen en duda su utilidad en los cambiantes frentes de guerra. La donación fue anunciada por el presidente de EE.UU., Joe Biden, como prueba del "compromiso duradero e inquebrantable de Estados Unidos con Ucrania".
Los periodistas de CNN fueron los primeros en ver los M1 Abrams en Ucrania, en un lugar del este del país, donde se veían unos seis vehículos escondidos entre el follaje.
Las tripulaciones entrenadas en Alemania dijeron que los vehículos –el principal vehículo de combate de las Fuerzas Armadas de EE.UU., valorado en US$ 10 millones y utilizado en Iraq contra las fuerzas de Saddam Hussein y los insurgentes– carecían de un blindaje capaz de detener las armas modernas.
"Su blindaje no es suficiente para este momento", dijo un miembro de la tripulación, cuyo código es Joker. "No protege a la tripulación. De verdad, hoy es la guerra de los drones. Así que ahora, cuando sale el tanque, siempre intentan atacarles".
Su colega, Dnipro, añadió que son el "objetivo número uno".
"Sin defensa, la tripulación no sobrevive en el campo de batalla", dijo.
La tripulación mostró a CNN sus intentos de colocar blindaje activo en un tanque dañado. Utilizaron placas de explosivo plástico que, al ser alcanzadas por un proyectil, detonan y proporcionan una contraexplosión protectora.
Los 31 Abrams desplegados en Ucrania están comprometidos cerca de la línea del frente en el este, según funcionarios de la 47ª Brigada Mecanizada, que los recibió a todos. La solicitud ucraniana de Abrams, tanques complejos y pesados, generó un importante debate a principios de 2023, ya que el vehículo estadounidense tiene una cadena de suministro compleja. Algunas versiones incluso funcionan con combustible para aviones.
Los funcionarios del Pentágono dijeron en abril que los Abrams fueron retirados de la línea del frente debido a la amenaza de los drones de ataque rusos, aunque la brigada dijo que algunos todavía estaban en acción, a pesar de las deficiencias que se habían materializado.
Gran parte de la línea del frente ucraniana está ahora dominada por el uso de drones de ataque autodestruibles, dispositivos diminutos y precisos que pueden enjambrar a la infantería e incluso causar daños significativos a los tanques. La llegada de estos drones llamados de visión en primera persona (FPV), pilotados por soldados que llevan gafas de videojuegos, ha cambiado la naturaleza de la guerra, limitando los movimientos e introduciendo un nuevo elemento de vulnerabilidad para los vehículos blindados.
Esta tripulación de Ucrania aprendió las limitaciones de los Abrams por las malas, en batallas campales alrededor de la ciudad de Avdiivka, de la que Rusia finalmente logró el control en febrero. Un conductor perdió una pierna al penetrar el blindaje. Pero no es solo la innovación lo que está lastrando a los carros de combate, sino que también parecen tener problemas técnicos.
Uno de ellos, aparcado bajo un árbol, estaba casi inmóvil durante la visita de CNN, debido a un problema en el motor, según la tripulación, a pesar de que el vehículo acababa de ser enviado desde Polonia. También se quejan de cómo, con lluvia o niebla, la condensación puede freír los componentes electrónicos del interior del vehículo.
CNN se puso en contacto con el Pentágono para obtener sus comentarios.
Las municiones también son un problema, como en otras partes del frente ucraniano. Dicen que parecen tener el tipo equivocado para la pelea en la que se encuentran.
"Lo que tenemos es más para peleas directas tanque a tanque, lo que ocurre muy raramente", dijo Joker. “Trabajamos mucho más a menudo como artillería. Necesitas desmontar una línea de árboles o un edificio. Tuvimos un caso en el que disparamos 17 tiros contra una casa y todavía estaba en pie”.
La tripulación ucraniana expresó su frustración por el hecho de que los tanques estuvieran hechos para el estilo de guerra de la OTAN, en el que la aviación y la artillería preparan el campo de batalla antes de que avancen los tanques y la infantería. Kyiv lleva mucho tiempo lamentándose de su falta de artillería y potencia aérea.
"Ellos nunca lo harían", dijo Joker, refiriéndose a los soldados de la OTAN que emprenden los mismos avances que ellos sin apoyo aéreo. Cambió al inglés para imitar a un soldado de la OTAN: "'Llama a la aviación, llama a la artillería'", dijo. "No tenemos aviación ni artillería. Solo tenemos tanques. Y ese es el problema".
Un portavoz del Ministerio de Defensa ucraniano dijo a CNN que "Ucrania está ahora probando y mejorando equipos que no estaban preparados inicialmente para nuestra guerra".
"Estamos pidiendo a todos los países que nos apoyen con equipamiento de cualquier nivel de capacidad técnica. Lo utilizamos todo en consecuencia", añadió el portavoz.
La decisión de Biden de suministrar los Abrams se produjo después de que los aliados europeos se comprometieran a enviar sus propios carros de combate, a principios de 2023, ante la fracasada contraofensiva ucraniana del verano boreal del año pasado, un paso que se había considerado impensable meses antes.
Los aliados de Kyiv se han tragado poco a poco las líneas rojas de los equipos que antes se negaban a suministrar. Los F-16 podrían llegar a Ucrania en los próximos meses. Oleksandr Syrsky, comandante militar de Ucrania, declaró el lunes que había firmado la documentación inicial para permitir a Francia enviar instructores militares al país para tratar de resolver un problema urgente de mano de obra en los frentes. El Ministerio de Defensa de Francia se negó a confirmar el plan, pero afirmó que, junto con otras ideas, se venía debatiendo desde hacía tiempo. La medida supondría una importante escalada en la implicación de Occidente en la guerra, ahora en su tercer año.
Más tarde, el Ministerio de Defensa de Ucrania pareció mitigar esas expectativas, afirmando en una declaración a CNN que había "iniciado el papeleo interno para avanzar cuando se tome la decisión".
Para la tripulación del Abrams, cada retraso en equipamiento o asistencia cuesta la vida de amigos. "Solo tengo una pregunta", dijo Joker sobre la asistencia estadounidense. "¿Por qué está tardando tanto y [llega] parcialmente? Estamos perdiendo tiempo. Es la muerte para nosotros".
Victoria Butenko contribuyó con este reportaje.