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Análisis

ANÁLISIS | Constitución y Poder Judicial están en riesgo por dominio de Morena en el Congreso de México

Por CNN Español

(CNN Español) -- El oficialista Morena y sus aliados, los partidos del Trabajo (PT) y Verde Ecologista (PVEM), se perfilan para ser la fuerza mayoritaria en el Congreso mexicano, tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, por los siguientes tres años.

Analistas consultados por CNN coincidieron en que esta mayoría calificada tendría implicaciones importantes pues permitiría al partido gobernante modificar la Constitución y llevar a cabo reformas significativas sin la necesidad del apoyo de la oposición.

En México, la Cámara de Diputados se compone por 500 miembros, de los cuales 300 son por mayoría relativa, a través del voto directo; y 200 de representación proporcional, también llamados plurinominales. El Senado se integra por 128 legisladores, 64 electos por voto directo, 32 por primera minoría y 32 por representación proporcional.

Para tener mayoría calificada y aprobar reformas a la Constitución y algunos nombramientos, se necesitan dos terceras partes de los legisladores presentes en el pleno de cada Cámara. Para aprobar leyes solo se requiere mayoría absoluta: 50% más 1 de los legisladores presentes en la sesión.

En Diputados se necesitan 334 votos para obtener una mayoría calificada, o un número menor dependiendo del total de asistentes a la sesión; en el Senado, se requieren 85 de los 128 legisladores para alcanzar dicha mayoría.

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De acuerdo con los resultados de los conteos rápidos publicados por el Instituto Nacional Electoral (INE) el domingo por la noche, Morena y sus aliados tendrían entre 346 y 380 diputados de mayoría relativa, más los plurinominales; y en el Senado entre 76 y 88 legisladores, más los plurinominales.

Qué sectores puede afectar la mayoría en el Congreso

Los analistas consultados coinciden en que los sectores que podrían verse afectados son: el energético, el Poder Judicial y los órganos autónomos.

“Van a seguramente buscar eliminar algunos de los órganos constitucionales autónomos, reformar el Poder Judicial. El principal riesgo es el entorno, justo a los límites y equilibrios del poder”, dice Arturo Espinosa Silis, director de la consultoría Strategia Electoral.

Enrique Cárdenas Sánchez, presidente del comité ejecutivo de la organización civil Signos Vitales, coincide, y alerta sobre las posibles reformas que Morena y sus aliados podrían implementar; entre ellas están la eliminación de los diputados plurinominales, que reduciría la pluralidad en el Congreso, y la militarización permanente, con los militares controlando no solo la seguridad pública, sino también aduanas, aeropuertos y puertos.

Aunque el mayor riesgo, señalan ambos analistas, estaría en la reforma del Poder Judicial, que implicaría la elección popular de jueces y magistrados, incluyendo ministros de la Suprema Corte, una propuesta hecha por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

“Lo que implícitamente traería una incorporación de la parte política a la cuestión judicial y, por tanto, indirectamente, una mayor sujeción de la Corte al Poder Ejecutivo”, advierte Cárdenas Sánchez.

También menciona los riesgos asociados a la reforma energética y la posible desaparición de organismos autónomos como el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), lo que limitaría el acceso a la información pública.

“El equilibrio entre poderes prácticamente se eliminaría”, dijo.

Reformas constitucionales propuestas por el presidente

López Obrador presentó el 5 de febrero una lista de 20 iniciativas de reformas constitucionales, entre ellas estaba la del Poder Judicial y la propuesta para desaparecer siete organismos autónomos.

López Obrador asegura que hay duplicidad de funciones entre estos organismos autónomos y algunas secretarías de Estado, por lo que representan un gasto para el erario.

El mandatario ha calificado a los organismos como “facciosos, onerosos, antipopulares”. De acuerdo con el presidente, su extinción generará ahorros que se utilizarán para pagar las pensiones de los trabajadores.

Entre los organismos autónomos que se propone eliminar están: el Instituto Federal de Telecomunicaciones; el INAI; el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social; y las comisiones Federal de Competencia Económica, Reguladora de Energía, Nacional de Hidrocarburos y Nacional para la Mejora Continua de la Educación.

“La eliminación de estos contrapesos constitucionales (los órganos autónomos) que han sido creados justamente para contener el excesivo poder del Ejecutivo le restan posibilidades a la ciudadanía de poder tener una contención del Poder Ejecutivo, lo que veríamos es una concentración muchísimo más hacendada, muchísimo más fuerte, del poder en una sola persona”, dice Cárdenas.

Esto, advierte, haría que el país pasara de tener una constitución liberal, como la actual, a una más de corte populista, que centre el poder en una sola persona.

La nueva legislatura inicia funciones el 1 de septiembre, mientras que Claudia Sheinbaum toma posesión como presidenta el 1 de octubre. Eso le deja un mes al presidente López Obrador para impulsar sus reformas con el nuevo Congreso.

Sobre la posibilidad de que el presidente López Obrador logre que se aprueben todas las reformas en ese periodo de tiempo, Espinosa Silis comenta que, aunque podría ser posible, “el inicio de una nueva legislatura es lento, si hacen un proceso de aprobación exprés, se las pueden declarar inconstitucionales”.

Y agrega: “Sacar 20 reformas constitucionales en un mes en el que la Legislatura apenas inicia, creo que se ve un poco apresurado”.

Además, señala que la relación entre Claudia Sheinbaum y López Obrador será crucial para determinar cómo se procederá con estas reformas.

“Claudia en la campaña dijo que apoyaba (las reformas), pero, bueno, hay que ver hasta dónde las apoya. Hay que observar cuál va a ser el diálogo y la relación entre ellos: si Claudia va a distanciarse de algunas de las políticas de López Obrador o si va a hacer totalmente leal y seguir exactamente el mismo camino sin un solo cambio, sin un solo ajuste, sin una sola revisión”, agrega Espinosa Silis.

¿La oposición puede hacer algo?

Respecto al papel de la oposición, conformada por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD), Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano, Espinosa Silis asegura que tienen pocas opciones efectivas para frenar las reformas de Morena.

Una de las pocas jugadas posibles sería atraer a algunos diputados o senadores de Morena a sus filas, pero si pasa lo contrario, y legisladores de estos partidos se cambian a Morena, “implicaría que podrían aprobar las reformas del presidente”, expone el director de Strategia Electoral.

También sugiere que, si la oposición tiene mayoría en más de 17 congresos locales, podrían detener algunas reformas constitucionales.

Cuando el Congreso de la Unión aprueba una reforma constitucional, ésta debe ser aprobada por al menos 17 congresos locales, como lo marca el artículo 135 de la Constitución.

Cárdenas también señala que es importante el papel que tendrá la sociedad civil. “Será fundamental ver qué puede hacer para presionar, para marcar al Gobierno en los movimientos que haga”, dijo.

Otro punto importante, dice Espinosa Silis, es ver cómo se desarrollará la relación entre Sheinbaum y López Obrador en los próximos meses, ya que esto influirá en la dirección que tome el nuevo Gobierno. “Este es un período en el que de facto hay dos presidencias, hay que ver cómo se acomodan estos equilibrios internos del poder en el Gobierno”.