Los ataques aéreos golpearon Beirut la madrugada de este lunes —la primera vez que los ataques caen dentro de los límites de la ciudad desde el 7 de octubre— luego de un fin de semana de combates en múltiples frentes en el Medio Oriente.
Israel amplió sus ataques contra Hezbollah en el Líbano y los hutíes en Yemen, avivando los temores de una guerra regional, mientras Hezbollah se comprometió a seguir luchando incluso cuando enfrenta crecientes pérdidas en sus filas superiores.
Esto es lo que necesitas saber:
• Este domingo, los ataques israelíes mataron a más de 100 personas y dejaron heridas a más de 350 en Líbano. El Ejército israelí afirmó que estaba atacando a Hezbollah, incluidos ataques con aviones de combate contra unos 45 objetivos cerca de una aldea en el sur del Líbano.
• El liderazgo de Hezbollah se está reduciendo, con al menos tres altos comandantes muertos este domingo, incluyendo Nabil Qaouk, un comandante clave y miembro del consejo central de Hezbollah. El líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah, murióel viernes en un ataque a la sede subterránea del grupo, donde también estaban presentes 20 miembros de Hezbollah, incluyendo el jefe de la unidad de seguridad de Nasrallah.
• El Ejército israelí también atacó lo que dijo eran plantas de energía y un puerto marítimo utilizado por los hutíes en Yemen, matando al menos a cuatro personas e hiriendo a decenas más. Los hutíes, al igual que Hamas y Hezbollah, están entre los grupos militantes respaldados por Irán que luchan contra Israel desde que comenzó la guerra en Gaza.
• Advertencias sobre la ayuda humanitaria: Una escalada del conflicto en el Líbano tendría “consecuencias extremadamente nefastas” para la situación humanitaria ya deteriorada en el país, dijo este domingo la agencia de ayuda humanitaria Relief International. Cientos de miles de personas se han visto obligadas a salir a la calle mientras los ataques israelíes destruyen viviendas e infraestructuras .
• El presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que está “trabajando como un demonio” con sus aliados para evitar una guerra total en Medio Oriente. Antes de la muerte de Nasrallah, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, descartó una propuesta de alto el fuego negociada por Estados Unidos.