Guerra entre Israel y Hezbollah, en vivo: última hora del conflicto en el Líbano, el ataque de Irán y más

Israel no ha dado garantías a la administración Biden de que el ataque a las instalaciones nucleares de Irán esté descartado como represalia por los ataques con misiles balísticos iraníes a principios de esta semana, dijo un alto funcionario del Departamento de Estado de EE.UU. a CNN el viernes.

El funcionario añadió que es "muy difícil saber" si Israel aprovechará el aniversario de los ataques de Hamas del 7 de octubre para tomar represalias.

"Esperamos ver algo de sabiduría y de fuerza, pero como ustedes saben, no hay garantías", dijo el funcionario cuando la CNN le preguntó si Israel había asegurado a Estados Unidos que los sitios nucleares de Irán estaban fuera de la mesa.

A principios de esta semana, el presidente Joe Biden afirmó que Estados Unidos no apoyaría que Israel atacara el programa nuclear iraní.

Hezbollah dijo que repelió una incursión israelí cerca de la ciudad de Adaisseh en el sur de Líbano, con enfrentamientos a raíz de un segundo en curso, de acuerdo con dos declaraciones el sábado.

El grupo militante dijo que la infantería israelí intentó avanzar por primera vez hacia la ciudad a las 23:00 horas del viernes.

"Combatientes de la Resistencia Islámica se enfrentaron a ellos, provocando una explosión masiva en la fuerza que avanzaba, que se vio obligada a retirarse, causando bajas entre sus filas", dijo Hezbollah.

La segunda declaración afirmaba que los soldados israelíes habían avanzado de nuevo hacia Adaisseh a la 1:50 de la madrugada del sábado.

El comunicado decía que sus combatientes "se enfrentaron al intento de avance y continúan los enfrentamientos".

La CNN se ha puesto en contacto con el ejército israelí para que comente los enfrentamientos de los que se ha informado.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron este viernes que dos de sus soldados de la Brigada Golani murieron en el "norte de Israel" en un ataque con drones que vino del este.

Las FDI no especificaron de quién sospechan que llevó a cabo el ataque, pero se produjo este miércoles, el mismo día en que la Resistencia Islámica en Irak, un grupo paraguas de varias milicias respaldadas por Irán, dijo que llevó a cabo ataques con drones contra tres objetivos en lo que llamó "operaciones separadas al norte de nuestros territorios ocupados."

Hamas elogió al grupo por su apoyo al pueblo palestino y afirmó que la operación con drones de la Resistencia Islámica Iraquí tenía como objetivo fuerzas israelíes en los Altos del Golán, ocupados por Israel, en el noreste del país, "con el resultado de muertos y heridos."

La Resistencia Islámica de Irak dijo también que había llevado a cabo otros tres ataques con drones el viernes en los Altos del Golán y Tiberíades.

Los Altos del Golán son una meseta estratégica que Israel arrebató a Siria durante la Guerra de los Seis Días en 1967, antes de que se anexara formalmente en 1981. Sigue bajo control del gobierno israelí y gran parte de la comunidad internacional lo considera territorio ocupado.

El Secretario de Estado, Antony Blinken, anunció el viernes casi US$ 157 millones en ayuda humanitaria estadounidense para "apoyar a las poblaciones afectadas por el conflicto en Líbano y la región", mientras el país sigue expresando su apoyo a la "limitada" campaña militar israelí en Líbano que ha provocado desplazamientos masivos.

"Esta financiación abordará las necesidades nuevas y existentes de los desplazados internos y las poblaciones de refugiados dentro de Líbano y las comunidades que los acogen", dijo Blinken en un comunicado. "La ayuda también apoyará a quienes huyen a la vecina Siria".

Cientos de miles de personas se han visto desplazadas en el país en las últimas semanas a medida que Israel ha intensificado su campaña militar contra Hezbollah, incluidas más de 100.000 personas, en su mayoría libaneses y sirios, que han huido a través de la frontera con Siria, según Naciones Unidas.

Funcionarios estadounidenses afirman que apoyan la campaña militar de Israel, pero señalan que les preocupa el impacto humanitario.

"Creemos que es apropiado que Israel, en este momento, esté llevando a los terroristas ante la justicia y tratando de empujar -tratando- y lanzando estas incursiones limitadas, lo que al menos en este momento son incursiones limitadas, tratando de hacer retroceder a Hezbollah de la frontera", dijo este jueves el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.

"En última instancia, nuestro objetivo es una resolución diplomática", añadió.

Las Naciones Unidas rechazaron una petición de Israel para trasladar algunas de sus fuerzas de paz cerca de la frontera libanesa pocos días antes de que Israel comenzara su operación terrestre a principios de esta semana.

La Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL, por sus siglas), la misión de mantenimiento de la paz de la ONU en el sur del Líbano, recibió una petición del ejército israelí para "desalojar" varias posiciones cerca de la Línea Azul, la zona de demarcación entre Israel y el Líbano que ha sido el centro de intensos combates en los últimos meses, según Jean-Pierre Lacroix, Secretario General Adjunto de la ONU para Operaciones de Paz.

La ONU ya había previsto la posibilidad de que Israel llevara a cabo "operaciones terrestres selectivas" en el Líbano y decidió no actuar en tal caso, declaró Lacroix en una sesión informativa celebrada el jueves.

"Habíamos tomado una decisión muy ponderada, exhaustiva y muy discutida de que sería mejor para la FPNUL, para las fuerzas de paz y en términos de nuestra responsabilidad con el mandato permanecer en esas posiciones", añadió el jefe.

Un poco de contexto: Las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU han estado estacionadas a lo largo de los aproximadamente 120 kilómetros de la Línea Azul desde que fue trazada por la ONU en 2000 para garantizar la retirada completa de Israel del Líbano. Las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU procedían de los ejércitos de varias naciones para vigilar la situación a lo largo de la Línea Azul que separa ambos estados.

El ejército israelí dijo que mató al menos a siete militantes, entre ellos un alto operativo de la Yihad Islámica palestina, en el ataque del jueves en la zona de Tulkarem en Ribera Occidental , utilizando al menos un avión de combate.

Israel describió a Ghaith Radwan como "un operativo clave" en la operación de la Yihad Islámica Palestina en Tulkarem. El ala militar del grupo, las Brigadas Al-Quds, confirmaron la muerte de Radwan, calificándolo de uno de los líderes del Batallón de Tulkarem en la Ribera Occidental  ocupada.

El ataque mató a otros miembros de la Yihad Islámica, así como operativos de Hamas, dijo el ejército israelí, alegando que los militantes se estaban reuniendo para llevar a cabo un ataque terrorista contra Israel en el "futuro inmediato."

Hamas confirmó el viernes que uno de sus comandantes, Zahi Yaser Oufi, se encontraba entre los ocho miembros muertos en el ataque. Israel dijo que Oufi era el líder de la red de Hamas en la zona de Tulkarem.

Al menos 18 personas murieron en el ataque, según informó el jueves el Ministerio de Sanidad palestino.

Alemania, aliada de Israel, dijo que el elevado número de víctimas civiles es chocante.

"En la lucha contra el terror, el ejército israelí está comprometido con la protección de los civiles en Ribera Occidental . Los palestinos, al igual que los israelíes, tienen derecho a una vida segura", publicó el Ministerio de Asuntos Exteriores alemán en X este viernes.

El líder de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasrallah, pronuncia un discurso televisado, Líbano, el 19 de septiembre de 2024, en esta captura de pantalla tomada de un video. (Crédito: Al-Manar TV/Reuters)

El asesinato por Israel del jefe de Hezbollah, Hassan Nasrallah, el pasado viernes, ha llevado al grupo respaldado por Irán a una clandestinidad aún mayor. Aún no se ha nombrado a su sucesor. Y lo que es quizá más insólito, aún no se ha celebrado un funeral, al menos público.

Por qué es importante: según las normas islámicas, los muertos deben ser enterrados lo antes posible, normalmente en 24 horas. Esto es especialmente cierto en el caso de los musulmanes asesinados por un Estado enemigo. Este viernes por la mañana surgieron dudas y noticias de que el difunto líder había sido enterrado en secreto. Pero una fuente cercana a Hezbollah dijo a CNN que no era cierto. "No se ha decidido nada", dijo la fuente, sobre la hora y el lugar del entierro.

Esto, unido a la falta de un sucesor claro, ha sumido al grupo en un mayor secretismo. Durante una semana, las declaraciones públicas de Hezbollah han sido, en el mejor de los casos, superficiales. Esto contrasta con la práctica del grupo chií respaldado por Irán de reforzar el apoyo de la comunidad con reuniones públicas y con los largos y enardecedores discursos de Nasrallah.

Sin embargo, todo esto subraya el hecho de que ésta es una guerra muy diferente. Durante la última guerra total con Israel en 2006, Nasrallah pronunció discursos televisados casi todos los días. La cúpula está operando más clandestinamente que nunca, después de haberse enfrentado a la mayor infiltración israelí en sus filas de su historia.

El bombardeo de Israel sobre el Líbano es más intenso que el punto álgido de la lucha de Estados Unidos contra el ISIS, según muestran los datos de un grupo de seguimiento de conflictos.

Israel ha bombardeado Líbano con una campaña de ataques aéreos sin precedentes en menos de tres semanas, mató a más de 1.400 personas, hirió a casi 7.500 y desplazó a más de un millón de personas de sus hogares, según el Ministerio de Salud libanés.

Para ponerlo en contexto, en el transcurso de dos días, el 24 y el 25 de septiembre, el ejército israelí afirmó haber utilizado 2.000 municiones y llevado a cabo 3.000 ataques.

En comparación, durante la mayor parte de los 20 años de guerra de Estados Unidos en Afganistán, Estados Unidos llevó a cabo menos de 3.000 ataques al año, salvo el primer año de la invasión, en el que se llevaron a cabo alrededor de 6.500 ataques, según datos de Airwars analizados por CNN.

El bombardeo israelí, que según Israel tiene como objetivo bastiones de Hezbollah en el país, supone la "campaña aérea más intensa" del mundo fuera de Gaza en las últimas dos décadas, según Airwars.