Padres que matan a sus hijos: es mucho más frecuente de lo que crees
(CNN) -- Es el más incomprensible de los crímenes: un padre o una madre mata a su propio hijo. Ocupa los titulares cuando sucede –como esta semana en el estado de Georgia, donde una madre latina fue acusada de apuñalar a cuatro de sus hijos hasta la muerte–. La verdad es que el filicidio ocurre con una frecuencia lamentable en Estados Unidos. Y las madres tienen casi la misma probabilidad de hacerlo que los padres.
Por supuesto que nos sorprende siempre que oímos otra historia sobre un padre o una madre que le quitó la vida a su propio hijo. Piensa en Andrea Yates o en Susan Smith. Pero lo que más nos sorprende (y nos entristece) es que este tipo de crimen suceda con tanta frecuencia.
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Un estudio de la revista Forensic Science International analizó los casos de filicidio cometidos entre 1976 y el 2007 y halló que cada año ocurrieron cerca de 500 en Estados Unidos.
- Casi el 72% de los niños que fueron asesinados por sus propios padres tenían 6 años o menos.
- Un tercio de las víctimas solo eran bebés de 1 año o menos.
Pero más del 13% de las víctimas eran adultos, específicamente personas entre 18 y 40 años. Así que la amenaza del filicidio no se aleja cuando la gente crece y se independiza.
El 41,7%% de los asesinos fueron mujeres, mientras en el 58,3% de los casos fueron hombres.
Cheryl Meyer, coautora de varios libros sobre este tema, dice que es probable que una madre mate a un hijo cada tres días en cualquier lugar de Estados Unidos.
Solo el 10% de las víctimas fueron asesinadas por sus padrastros o madrastras. Eso significa que el 90% de las víctimas fueron hijos e hijas biológicos de los asesinos. Y los hijos (58%) sufrieron más por este crimen que las hijas (42%).
Para cometer los asesinatos, los padres usaron algo que en el estudio quedó definido como “armas personales”, con las cuales golpearon o ahogaron a las víctimas en la mayoría de los casos que involucran a menores de edad.
En el 72% de los casos en que las víctimas fueron adultos, los padres usaron armas de fuego.
Las razones
Timothy Mariano, autor principal del estudio, ofreció tres teorías sobre las razones que llevan a cometer un crimen tan execrable: los padres suelen tener enfermedades mentales, suelen tener altos niveles de testosterona o consideran que su descendencia no era deseada.
El psiquiatra forense Phillip J. Resnick, pionero en la investigación de los casos de filicidio, ha identificado cinco grandes razones:
- Altruismo: un padre o una madre mata a su hijo porque considera que es lo mejor para el niño o niña. Puede estar basado en algo real (que el hijo sufra una enfermedad terminal, por ejemplo) o preceder el suicidio de su padre o madre, pues siente que sería injusto abandonar al hijo para que se enfrente solo a este cruel mundo.
- Psicosis aguda: un padre o una madre mata a su hijo porque tiene ideas que no son compatibles con la realidad. Por ejemplo, cree que su hijo está poseído por el demonio.
- Hijos no deseados: un padre o una madre mata a su hijo porque lo ve como un obstáculo, como un estorbo.
- Accidental: la muerte del hijo o hija es el resultado involuntario del abuso físico por parte de los padres.
- Venganza conyugal: el padre o la madre mata a su hijo es un esfuerzo por vengarse de su pareja.