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Funcionarios investigan acusaciones de terrorismo después de que un migrante libanés fuera detenido en la frontera sur de EE.UU.
(CNN) -- Funcionarios federales encargados de hacer cumplir la ley iniciaron una investigación luego de un informe de la Patrulla Fronteriza de EE.UU. sobre la detención de un hombre en la frontera de Texas que dijo que era miembro de una organización terrorista extranjera y que había venido a Estados Unidos para construir una bomba, según ha conocido CNN.
En un memorando interno de la Patrulla Fronteriza de EE.UU. obtenido por The New York Post, funcionarios describen la detención de un ciudadano libanés llamado Basel Bassel Ebbadi en el sector de patrullaje fronterizo de El Paso el 9 de marzo. El memorando dice que Ebbadi fue entrevistado por un grupo de respuesta terrorista táctica después de que amenazó al personal fronterizo.
“Ebbadi fue examinado por personal médico y le preguntaron qué estaba haciendo aquí en Estados Unidos”, dice el memorando. “Ebbadi respondió: 'Voy a intentar fabricar una bomba'”.
El individuo está bajo custodia de Estados Unidos, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza. Una fuente familiarizada con la situación le dijo a CNN que se estaba llevando a cabo una investigación federal.
Si bien la agencia no ofreció detalles oficiales, emitió la siguiente declaración:
"Si un individuo representa una amenaza potencial a la seguridad nacional o pública, le negamos la admisión, lo detenemos, lo expulsamos o lo remitimos a otras agencias federales para más verificación de antecedentes, investigación y/o enjuiciamiento, según corresponda”.
CBP es parte del Departamento de Seguridad Nacional, que examina e investiga a las personas antes de que ingresen a EE.UU. y monitorea la información de inteligencia y de aplicación de la ley para monitorear las amenazas. El departamento también trabaja en estrecha colaboración con el FBI.
El número de “terroristas conocidos o sospechosos” que intentan cruzar a Estados Unidos desde la frontera sur ha aumentado en los últimos cinco años, dijo la semana pasada el director del FBI, Christopher Wray.
“Creo que hemos visto en los últimos cinco años un aumento en el número de KST –o terroristas conocidos o sospechosos– que intentan cruzar la frontera sur”, testificó Wray el martes ante la Comisión de Inteligencia de la Cámara de Representantes.
Pero eso no significa que todos sean terroristas.
El número de personas encontradas en la frontera que tienen registros en la lista de vigilancia terrorista en un año determinado es extremadamente pequeña y representa un porcentaje muy pequeño del número total de terroristas conocidos o sospechosos que intentan ingresar o viajar a EE.UU. a través de otros medios.
Cuando las autoridades federales procesan a los migrantes en la frontera, toman datos biométricos, como huellas dactilares y escaneos faciales, y examinan a los individuos a través de ciertas bases de datos policiales para detectar cualquier señal de alerta. Alguna información, como de dónde vienen los migrantes, puede desencadenar controles adicionales.
Si no existe la llamada información despectiva sobre una persona en las bases de datos de EE.UU., entonces el migrante es liberado en espera de una fecha en la corte de inmigración.
El informe de Evaluación Anual de Amenazas recientemente publicado por la Oficina del Director de Inteligencia Nacional no hace referencia específica al riesgo de que terroristas conocidos o sospechosos intenten ingresar a los EE.UU. desde la frontera sur.
La seguridad fronteriza y la crisis migratoria se encuentran entre las principales preocupaciones de los votantes en este ciclo electoral. El presidente Joe Biden y el expresidente Donald Trump visitaron recientemente las comunidades fronterizas de Texas el mismo día. Y algunos alcaldes de Texas están hartos de las disputas políticas entre sus gobiernos estatales y federales.
-- Aileen Graef y Michael Conte de CNN contribuyeron a este informe.
