La mayoría de los votantes cree que Donald Trump no reconocería su derrota si perdiera las elecciones presidenciales, según una nueva encuesta de CNN realizada por SSRS.
Una minoría considerable de sus partidarios dice que los candidatos perdedores no tienen obligación de hacerlo. Y si las impugnaciones legales relacionadas con las elecciones llegan a la Corte Suprema, la mayoría de los votantes tienen poca o ninguna confianza en que el alto tribunal tome las decisiones correctas.
Solo el 30% de los votantes registrados cree que Trump aceptaría los resultados de las elecciones y reconocería su derrota si perdiera, mientras que el 73% dice que la vicepresidenta Kamala Harris aceptaría una derrota electoral.
La mayoría de los votantes registrados (54%) cree que Harris concedería su derrota si perdiera y que Trump no, mientras que el 18% dice que ambos candidatos lo harían, el 15% que ninguno de ellos lo haría y solo el 11% dice que Harris no concedería su derrota pero Trump sí.
Centrándose en los partidarios de cada candidato, el 97% de los partidarios de Harris esperaban que ella reconociera su derrota si perdía, mientras que una mayoría mucho más pequeña, el 57% de los partidarios de Trump, cree que él reconocería una derrota.
Ese 57% representa un aumento respecto de julio, cuando solo la mitad de los partidarios de Trump pensaban que admitiría una derrota, un cambio que se produce incluso cuando su campaña ha sentado las bases para debilitar la confianza en el sistema electoral de Estados Unidos y reclamar la victoria independientemente de los resultados en noviembre.
Los partidarios de Harris están ampliamente unificados en sus percepciones de lo que harían los candidatos: más de 9 de cada 10 partidarios de Harris dicen que ella concedería la derrota, pero que Trump no lo haría (92%).