Brasil demostró por qué es favorito en el Mundial de Qatar en un partido que siempre dominó. En el primer tiempo a la canarinha le costó abrir el marcados a pesar de múltiples llegadas. Pero en el segundo tiempo Richarlison marcó un doblete —el segundo, un golazo de tijera de antología, la mejor anotación de lo que va el torneo— y Brasil, con todo su repertorio desplegado, cómodo y creativo, no le dejó opción a Serbia de pelear el partido.
Los goles fueron pocos para el poderío de Brasil en el juego. La pentacampeona, con una alineación ultraofensiva, llegó a Qatar para ser protagonista. Tite sabe cuál es la fórmula de la efectividad (en la eliminatoria Brasil fue invicto, después de todo).
Richarlison fue la figura, Neymar fue el que menos brilló y Vinícius y Casemiro fueron determinantes.