Nueva Delhi (CNN Business) – Hace más de dos décadas, la India comenzó su transformación en una potencia mundial de las tecnologías de la información, dando paso a una era de creación de riqueza y empleo nunca vista en ese país.
Ahora, la tercera economía de Asia está preparada para la próxima gran frontera de la tecnología: la creación de una nueva generación de empresas de software, como Zoom o Slack.
La pandemia de covid-19 ha obligado a las empresas de todo el mundo a realizar enormes inversiones en infraestructura digital, fomentando la influencia de las empresas que ofrecen software como servicio, o ScuS. El año pasado, las empresas invirtieron US$ 15.000 millones más a la semana en tecnología, a medida que se esforzaban por crear entornos de trabajo remoto seguros, según un estudio de KPMG.
Las empresas de ScuS proporcionan aplicaciones basadas en la web que se encargan de todo, desde la seguridad del software hasta su rendimiento. Algunas de las empresas de ScuS más conocidas del mundo son Zoom, SAP Concur y Salesforce, el gigante estadounidense propietario de la aplicación de mensajería para el trabajo Slack.
El sector del software como servicio en la India podría alcanzar un valor de US$ 1 billón para 2030 y crear casi medio millón de nuevos puestos de trabajo, según un informe reciente elaborado por la consultora McKinsey & Co. y SaaSBoomi, una comunidad de líderes del sector.
En la India hay casi un millar de empresas de este tipo, de las cuales 10 son unicornios, o startups que valen al menos US$ 1.000 millones, según el informe.
“Esto puede ser una oportunidad tan grande como lo fue el sector de los servicios informáticos en los años 90”, dijo Girish Mathrubootham, CEO de Freshworks, la empresa de ScuS más conocida de la India. El mes pasado, presentó una oferta pública inicial (OPI), uniéndose a una serie de grandes unicornios tecnológicos del país que cotizarán en la bolsa este año.
Freshworks se fundó hace más de una década en la ciudad de Chennai, en el sur de la India. Al igual que Salesforce, proporciona software para ayudar a las empresas a gestionar las relaciones con sus clientes. También es el unicornio más antiguo de la India en el sector, ya que ha recaudado fondos de inversores como Tiger Global y Accel, y tiene más de 50.000 clientes. La empresa fue valorada por última vez en US$ 3.500 millones en una ronda de financiación de 2019, según la firma de datos Tracxn.
Otras firmas indias de ScuS han encontrado impulso al centrarse en negocios de nicho. Zenoti, por ejemplo, es un unicornio que construye software para la industria de spa y salones de belleza.
De los 10 unicornios de ScuS de la India, seis alcanzaron ese hito en 2020, y los inversores de todo el mundo están prestando atención. El año pasado, los inversores inyectaron US$ 1.500 millones en empresas indias de ScuS, cuatro veces más que en 2018 o 2019, según el informe SaaSBoomi.
Inversores optimistas
Los inversores están entusiasmados con las ScuS debido a la “adopción masiva” de software en la última década, según Mohit Bhatnagar, director gerente de Sequoia Capital India.
Aunque la India es un actor pequeño en el mercado mundial de ScuS, los inversores afirman que el país podría llegar a dominar el sector por dos motivos: su amplia reserva de desarrolladores de habla inglesa y el costo relativamente bajo de su contratación.
Gracias al auge de la industria india de las tecnologías de la información, la ingeniería de software se ha convertido en una de las opciones profesionales más solicitadas en el país.
“La India tiene una de las mayores comunidades de desarrolladores del mundo”, explica Bhatnagar a CNN Business. Muchos de ellos han trabajado en algunas de las mayores empresas tecnológicas mundiales.
Abhinav Asthana, cofundador de Postman, señaló que su experiencia como becario en Yahoo, en Bengaluru, fue decisiva en la decisión de crear su producto.
Se le ocurrió la idea de construir una herramienta que simplificara el proceso de prueba de las API (Application Programming Interface). Una API es un código de programación que define el modo en que dos aplicaciones se comunican entre sí, y Postman afirma que ha facilitado el trabajo de los ingenieros a la hora de diseñar y construir sus API.
“Vimos cómo se creaba el software en estas empresas globales, y vimos que la API era un problema clave”, dijo Asthana a CNN Business.
Ahora, Postman es el unicornio de ScuS más valioso de la India, con una valoración de US$ 5.600 millones.
Clientes internacionales, ingenieros indios
El bajo costo de operar en la India es una gran ventaja. Según un informe de la consultora Bain & Company, el salario de los desarrolladores de nivel inicial en la India es un 85% inferior al de sus homólogos en Estados Unidos.
“Si estás creando una empresa de ScuS en Estados Unidos, es mejor tener un cliente de un millón de dólares que uno de US$ 10.000, porque tienes que pagar las ventas y el marketing en ese país”, afirma Prasanna Krishnamoorthy, socio director de la aceleradora de ScuS Upekkha.
“Cuando atiendes a clientes de la India, puedes tener estas pequeñas y medianas empresas, además de las grandes”.
La mayoría de las empresas de ScuS se centran en clientes globales, de forma similar a la estrategia que siguieron los gigantes informáticos de la India, como TCS e Infosys. Los inversores ven esto como un cambio favorable, ya que la mayoría de los unicornios más antiguos de la India, desde Flipkart hasta Paytm, se han centrado principalmente en el mercado nacional.
Casi el 98% de las empresas de la lista Fortune 500 utilizan los productos de Postman, según Asthana, mientras que el primer cliente de Freshworks tenía su sede en Australia.
Las empresas de ScuS están mucho mejor situadas para globalizarse que las empresas de comercio electrónico como la india Flipkart, por ejemplo. Escriben el software una vez y pueden utilizarlo varias veces.
“Para un Flipkart, se necesitan miles de millones de dólares [para crecer internacionalmente], pero, para un Freshwork, se necesita mucho menos capital para globalizarse”, afirma Mathrubootham, que también es inversor en Postman. Esto se debe a que las empresas de comercio electrónico necesitan mucho dinero para establecer operaciones físicas en otros lugares: tienen que contratar a conductores de reparto, alquilar almacenes y comprar inventario.
Bhatnagar, de Sequoia Capital, dijo que los empresarios indios de software “dominaron” el arte de la “venta a distancia” bastante pronto.
“Sinceramente, en estos dos últimos años, todo el mundo ha tenido que entender cómo hacer mejor las ventas a distancia”, añadió.
A pesar de la euforia, hay algunos obstáculos que las empresas indias tienen que superar antes de poder cumplir la promesa del billón de dólares.
Los ingenieros indios formados en el sector de los servicios de TI pueden tener dificultades para desarrollar la disciplina necesaria para crear una empresa centrada en el producto.
En los servicios de TI, “son cuerpos de venta y se dice que sí a todo lo que dice el cliente”, dijo Krishnamoorthy. Las empresas de ScuS, en cambio, tienen que decir no al 99% de los clientes [potenciales], añadió.
Y el ecosistema de las empresas emergentes de la India sigue siendo relativamente inmaduro en comparación con Silicon Valley. A pesar del enorme tamaño de algunos unicornios locales, Mathrubootham dijo que el país no tiene una “marca de producto tecnológico global”.
Pero espera que las futuras empresas de ScuS puedan cambiar eso.
“Mi sueño personal es ver a la India como una nación de productos”, añadió.